¿Cuántos políticos pueden ser un buen ejemplo? ¿A cuántas personas pueden llegar a engañar respecto a si lo que hacen es en interés de todos? Porque aparte de tener una buena oratoria y una buena defensa de nuestras opiniones, se debe tener empatía hacia los demás, algo de lo que carecen muchos de nuestros políticos.
Es algo común que esta clase política pierda eficacia como modelo, debido a la disonancia que existe entre sus palabras y sus actos y a los hechos me remito, cada vez que van a la Asamblea se sirven de esta ocasión para montar circos y satisfacer sus egos, siempre tienen la razón (o creen tenerla) despotrican de sus contrincantes como si ellos fueran perfectos y es que a veces vemos en los demás el reflejo de lo que en realidad somos nosotros mismos. Si después de todo lo que ha pasado con esta pandemia no somos capaces de ponernos en el lugar del otro, creo que como seres humanos hemos fracasado ya que en vez de evolucionar hemos involucionado.
La política actual ya no tiene nada que ver con la de antaño. Estamos en un mundo volátil lleno de dificultades, donde las personas hemos dejado de funcionar como tal y más que eso, personas, parecemos máquinas programadas que al encontrarnos con cosas horribles ni siquiera nos inmutamos, o las intentamos justificar, pero teniendo una actitud ejemplarizante es el único modo con el que daremos una lección; las palabras se las lleva el viento y están cargadas de connotaciones y significados que si no van seguidas de hechos, carecen de valor alguno.
Si queremos cambiar nuestra actitud y hábitos, no solo bastará con repetirlo dentro de nuestra cabeza como si fuese un mantra, sino que los hechos serán los que marquen la diferencia de un político mentiroso o uno comprometido con las personas; los políticos que necesita nuestra sociedad no tienen que convencer a las personas con palabras, porque por sí solas poco o nada persuaden, hay que dar ejemplo con nuestros hechos.
"Para que se pueda producir un cambio hay que empezar cambiando el comportamiento de uno mismo".