Cultura

La piedra roseta

Con la finalidad de explicar lo mejor posible la información en el artículo de la piedra roseta, vamos a intercalar los datos y citas aportadas con las conclusiones a las que se ha llegado. ((Estas estarán entre dos paréntesis y en negrita))

Cortesía de: https://www.youtube.com/watch?v=9Ii5FFGRELU

Y Wikipedia.

A mediados de junio de 1799 y viendo que el asedio Inglés sería largo, los franceses seguían reforzando sus defensas, situando en el delta del Nilo se encuentra la ciudad de Roseta. Con el fin de reconstruir la antigua fortaleza árabe que allí había, los soldados bajo el mando del teniente  Pierre-François Bouchard, comenzaron a  reparar los muros. La estela fue tallada en el período helenístico y se piensa que originalmente estuvo expuesta dentro de un templo, posiblemente en la cercana Sais. Fue probablemente trasladada al final de la Antigüedad o durante el sultanato mameluco de Egipto y finalmente usada como material de construcción en un fuerte cerca de la localidad de Rashid (Rosetta), en el delta del Nilo. Allí fue hallada el 15 de julio de 1799 durante la campaña francesa en Egipto. Los árabes solían coger materiales de sus templos para construir sus propias edificaciones. Oculta entre estas paredes desde la época de los faraones, había una enorme plancha de piedra. Mientras los soldados derribaban la antigua defensa árabe la enorme piedra volvió a ver la luz e inmediatamente se dieron cuenta que estaban ante algo poco usual y posiblemente valioso. La Piedra de Rosetta tiene 112,3 cm de altura, 75,7 cm de ancho y 28,4 cm de espesor, mientras que su peso se estima aproximadamente en 760 kilogramos.​Presenta tres inscripciones: La superior en jeroglíficos del antiguo Egipto, la central en escritura demótica egipcia y la inferior en griego antiguo. La superficie frontal está pulida y las inscripciones ligeramente incisas en ella, los laterales están suavizados y la parte posterior está toscamente trabajada, sin duda porque no estaba a la vista en su ubicación original. ((Aquí debo decir que he visto la piedra y por la parte posterior presenta un aspecto reblandecido, que desde luego no presenta el granito. Y también creo que si las inscripciones están ligeramente incisas, es porque esa piedra estaba sin terminar de construir en el momento que se aborto la construcción.))

Fue una suerte extraordinaria que la persona que estuviese allí tuviera curiosidad e interés para preguntarse qué podría ser aquello. El general francés Jacques-François de Menou, ordeno que fuera enviada al instituto  en el Cairo para que tradujeran el griego.

¿Qué diría? Podría utilizarse el griego para traducir los jeroglíficos. Le lengua griega era fácilmente comprensible asique el texto se tradujo sin problemas. Era un decreto en honor al faraón Ptolomeo V en el primer aniversario de su mandato. En agradecimiento al bien que había hecho por Egipto, se ordenaba colocar placas como esa en todo el país. Se sabe que los griegos habían gobernado Egipto desde el año 300 antes de nuestra era, hasta algunas décadas después de Cristo, ¿Cómo pudo sobrevivir esa piedra durante más de 1800 años, ¿Existían otras parecidas? El texto parecía intrascendente hasta que se tradujo la última línea: “” este decreto será grabado en la piedra de granito en caracteres sagrados, nativos y griegos””. ((Aquí hay algo que no encaja. Por los datos que hemos manejado hasta ahora, sabemos que los templos egipcios tienen 12.500 años. Al igual que todo este tipo de construcciones que están por todo el mundo. Y todas están sin terminar de construir, incluidos desde luego los templos egipcios. Lo que implica entre otras cosas; que esos llamados templos jamás funcionaron como tales, ni fueron utilizados por los verdaderos constructores. Y desde luego tampoco fueron utilizados por los supuestos faraones. Es decir: Las dinastías de Reyes y Faraones de la egiptología jamás existieron. Y la cronología oficial de los Griegos ó Antigua Grecia se refieren al período de la historia griega que abarca desde la Edad oscura de Grecia, comenzando en el año 1200 a. C. y la invasión dórica, hasta el año 146 a. C. y la conquista romana de Grecia tras la batalla de Corinto.

Por lo que difícilmente en esta última línea del griego se podría hacer mención a los Jeroglíficos y al demótico, puesto que estos tienen la cronología de la piedra en la que están, y esta la de los templos de los que formaba parte, 12.500 años., muy anterior a la cronología oficial de los Griegos.

Ni tampoco se puede asegurar en la parte griega, que los tres textos digan lo mismo, ya que el supuesto lenguaje griego tiene en realidad la cronología de la piedra en la que está escrito 12.500 años y por lo tanto ese lenguaje es tan incomprensible para nosotros como el jeroglífico y el demótico. Sin mencionar el hecho de que los nombres de los supuestos lenguajes se pusieron con posterioridad, por la egiptología. Otra cosa es que con esos signos hoy se expresen varios idiomas actuales))

Los tres textos decían lo mismo, la noticia no tardó en extenderse por Europa la piedra ofrecía un gran interés para el estudio de los caracteres egipcios, tal vez nos diese la clave de ello.

El proceso de descifrado era observado con sumo interés tanto por los militares franceses, como por los británicos. Si la piedra de roseta servía para traducir su idioma, podrían también resucitar su pasada gloria para ser adoptada por Francia, ¿Cuánto tardarían los franceses en descifrar la piedra y por tanto leer los jeroglíficos? Podrían descifrar la clave antes que los ingleses les obligasen a rendirse.

Siguiendo órdenes militares los expertos del instituto se lanzaron a una carrera por descifrar la piedra. Tenían tres textos cada uno en una escritura distinta: De arriba abajo eran jeroglíficos, demótico y griego. En el texto griego se afirma que la información es la misma que en los otros dos. El griego no ofrecía problema alguno, sin embargo  había varios obstáculos para traducir los dos textos egipcios.

El primero o más importante, es que nadie había hablado o escrito las dos lenguas egipcias desde hacía más de 2.000 años. Los franceses no tenían ninguna idea del significado de aquellos símbolos o palabras, ¿Eran símbolos fonéticos como en un alfabeto?  O era un lenguaje ideográfico como el chino. Sin datos anteriores debían partir de cero.

((Vamos a ver: Resulta que se encuentran papiros con más de 4.500 años que pueden ser leídos sin problema, según los egiptólogos. ¿Pero no pueden leer el lenguaje jeroglífico, demótico, ni griego?))

Veamos esta información cortesía de:

Laura Fernández.

22 DE JULIO DE 2016 · 17:21 ACTUALIZADO A 27 DE JULIO DE 2016 · 12:17

El documento, que fue encontrado en el 2013 en el mar Rojo y que explica uno de los mayores enigmas de la construcción de la gran pirámide, ya está expuesto al público en El Cairo

Desde el pasado jueves, el Museo de El Cairo, situado en la céntrica plaza de Tahrir, cuenta entre sus colecciones con el papiro más antiguo del mundo hallado en Egipto. Un documento de hace 4.500 años y escrito con jeroglíficos que desvelan uno de los mayores misterios de esta antigua civilización: cómo fue construida la gran pirámide de Gizeh que sirvió de mausoleo para el faraón Keops.

El hallazgo se produjo en 2013 por los arqueólogos Pierra Tallet y Gregory Marouard en el puerto de Wadi el-Jarf, a orillas del mar Rojo, en una expedición franco egipcia. Durante las excavaciones aparecieron varios documentos que formaban parte de un libro administrativo de gran valor histórico. Entre sus páginas, un papiro que correspondía a Mener, el capataz de las obras de la gran pirámide del que se cree que contaba con unos 200 hombres a su cargo, resolvía algunos de los enigmas del Antiguo Egipto.

Conocido desde entonces como el Registro de Mener, este diario de trabajo que data del año 27 y corresponde a la última etapa de la construcción del mausoleo, detalla cómo fue el pago a los jornaleros, la alimentación que recibieron, la procedencia de los materiales y su transporte hasta Gizeh. Datos sumamente importantes para lograr comprender la magnitud de las obras de la única maravilla del mundo antiguo que aún continúa en pie.

Según los investigadores, las piedras calizas utilizadas procedían de la cantera de Tura, a orillas del Nilo. Desde allí eran trasladadas en barco por un sistema de canales, por lo que se estima que podían tardar unos cuatro días en llegar. En aquella época, los trabajos estaban supervisados por el visir Ankhaf, ministro del faraón. Pues, en uno de los pasajes, Mener explica cómo fue su encuentro con el visir. Como este documento corresponde a la última etapa, cuando las obras estaban a punto de ser finalizadas, varios estudiosos creen que durante los primeros años del reinado de Keops el responsable pudo haber sido el visir Hemiunu. Los datos, publicados por los arqueólogos en la revista Near Estern Archaeology, ya están al alcance de todo el mundo. Una de las salas más transitadas del Museo de El Cairo guarda entre sus vitrinas dos de los fragmentos originales más importantes de la historia de esta antigua civilización que pone fin a las teorías que envolvían de misterio la necrópolis de Gizeh.

CONCLUSIONES:

((Como sabemos los papiros es el nombre que recibe el soporte de escritura elaborado a partir de una hierba palustre acuática de la familia de las ciperáceas muy común en el río Nilo en Egipto ¿Y esperan que nos creamos que esta hierba se ha conservado 4.500 años enterrada sin desaparecer? Y además resulta que en este papiro se resuelve nada menos que el misterio de cómo se construyeron las pirámides. Pero vamos a ver; ¿se les ha ocurrido datar ese papiro? Claro que no, ya que si lo hacen la fecha sería actual y eso no interesa a la egiptología, pues no podrían decir que han resuelto el misterio de la construcción de la gran pirámide.

Pero es que además se supone que son capaces los egiptólogos de leer sin problema ese papiro tan antiguo. Y sin embargo no son capaces de leer ninguno de los lenguajes de la piedra roseta que según ellos tiene 1.800 años))

Un segundo obstáculo es que la piedra estaba partida en la parte superior y en los dos lados. La sección jeroglífica era la que estaba más dañada, solo quedaban 14 líneas, el texto demótico tenía 32 líneas pero le faltaba parte del margen derecho, La sección en griego tenía 54 líneas. Los franceses no tenían manera de saber que palabras o líneas concordaban con las palabras griegas y el tiempo no estaba de su lado.

Cuando los ingleses derrotaron a los franceses, acordaron que los oficiales franceses podían llevarse todas sus pertenencias personales. Pero el instituto del Cairo debía entregar todos sus hallazgos. Los ingleses tenían la piedra, pero los franceses habían hecho copias y la carrera por ver quién sería el primero en descifrar sus misterios ocultos había comenzado. Existía la creencia de que los jeroglíficos contenían secretos acerca de los Dioses el universo y la astronomía, que eran desconocidos por el gran público. Desde el principio hubo una gran curiosidad puesto que todo era obvio y evidente, especialmente porque estaba relacionado con los templos y los sacerdotes. Y se pensaba que debía haber algún misterio, que los jeroglíficos no eran unas escrituras normales, Que si se descifraba el código los jeroglíficos nos dirían cosas que nadie había pensado jamás.

Y ahora que se disponía de la clave del idioma egipcio, todos los esfuerzos se volcaron en intentar descifrar la piedra de roseta. Tras su llegada a Londres en 1802, comenzaron a distribuirse copias de los textos por todas las universidades europeas, la carrera había comenzado y parecía el mayor misterio detectivesco del mundo, sus respuestas sin duda cambiarían nuestra visión de la religión, la ciencia y la historia, ¿Cómo afectaría a nuestras creencias en la biblia? ¿Qué mágicas medicinas y tecnología serian descubiertas? ¿Por qué desapareció una civilización tan grandiosa?

Rafael Alfonso Alfaro García.

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