Los largos meses de confinamiento y restricciones para viajar han hecho que la relativa libertad con la que nos movemos ahora sea aprovechada por muchos para hacer lo que siempre han deseado y no podían hacer. No se trata solo de viajar cerca o lejos, solo o acompañado, dentro de España o en otros países... sino de tener nuevas experiencias después de haber comprobado que durante mucho tiempo ni las nuevas ni las viejas eran posibles. El repetido dicho ...al menos una vez en la vida... se ha vuelto más real y posible que nunca.
Dormir en un vagón de un tren, conducir vehículos de alta gama, dar un paseo romántico y cenar en un velero, permitirse una comida con estrellas Michelin o decidirse a descargar adrenalina practicando rafting o puenting son algunas de las experiencias que están teniendo buena acogida en los últimos meses, según indican en Aladinia.
Aunque la idea parece nueva, llevan funcionando más de 12 años y hay más de 500.000 personas que ya han probado las propuestas de Aladinia y les han dado una valoración promedio de 9,4 sobre 10. Una de las claves de su éxito es ser muy exigentes a la hora de seleccionar qué ideas ofrecer a sus clientes. “De hecho –comenta Joaquim Esteve, fundador de la empresa– sólo una de cada diez ideas que nos proponen nuestros colaboradores supera los estándares que exigimos, así podemos ofrecer siempre experiencias diferentes y de mejor calidad”.
Pero entre todas ellas, las que más llaman la atención y tienen mayor demanda son las que, de una forma u otra, suponen volar. Tal vez porque volar es una de las cosas que el hombre no puede hacer por sí mismo. De hecho en el último mes las peticiones de este tipo casi se han duplicado. Estas son algunas de las propuestas de Aladinia que permiten parecerse, aunque solo sea por unos minutos, a Ícaro o al más moderno Supermán:
Pilotar una avioneta
Convertirte en piloto de avioneta en solo una hora parece un sueño, pero es posible con el Curso de Iniciación al vuelo de la escuela de pilotos Aero2mil que operan en el aeródromo de la Juliana, cerca de Bollullos de la Mitación en Sevilla. Tras la bienvenida y una visita por sus instalaciones y hangares aprenderás con una clase teórica el funcionamiento del avión y los mandos. Acto seguido, te prepararás para subir a la avioneta y, ¡a volar! Junto con un piloto profesional podrás experimentar lo que se siente al tomar los mandos, poniendo en práctica todo lo que nos han enseñado sobre el funcionamiento de la avioneta y sobrevolar un entorno idílico, como es el Parque Nacional de Doñana y el río Guadalquivir, sin duda, un paisaje maravilloso. Precio desde 60 euros.
Esta experiencia también puede realizarse en el aeródromo de Casarrubios, cerca de Madrid. Tienes la posibilidad de realizar vuelos de 30, 45, 60 y 120 minutos y proponer la ruta de vuelo que más se ajuste a tus preferencias. En la modalidad de media hora, por ejemplo, podrás disfrutar sobrevolando el pantano de San Juan y en la de una hora el maravilloso Monasterio de el Escorial.
Salto en paracaídas desde casi 5.000 metros
Los que busquen una experiencia voladora más directa sin duda disfrutarán con el minuto más largo de su vida en caída libre desde 4.600 metros de altitud y los siguientes cinco minutos más relajados tras el salto tándem junto con un instructor experimentado de la empresa Skydive Spain que manejará el paracaídas. Será el momento perfecto para contemplar las hermosas vistas a tus pies de Sevilla y también de la costa de Huelva y Cádiz. Y para que tus amigos te crean cuando lo cuentes, te llevarás un recuerdo para siempre gracias a unas fotos y un vídeo que se realizarán con una cámara interna que grabará cada detalle desde el despegue, pasando por el salto, el vuelo y el aterrizaje. El total de la experiencia dura entre 3 y 5 horas y el precio suele rondar los 250 euros.
Volar en globo disfrutando de un cava
Imitar a Phileas Fogg y su viaje en globo (aunque curiosamente en la obra original de Julio Verne utiliza numerosos medios de transporte, incluso un elefante, pero nunca monta en globo) es algo que no hay que perderse. La actividad comienza dándonos la bienvenida en el globódromo oficial de Manacor donde nos explicarán todo lo referente a la aerostación, nos mostrarán un vídeo y algo muy importante, nos detallarán las normas de seguridad. Una vez visto esto comenzará nuestra aventura de verdad, incluyendo el participar, si así lo queremos, en el montaje del globo, algo muy curioso e interesante. No hay que preocuparse por el despegue, ya que será más suave de lo que podamos imaginar, y así, sin más, empezaremos a ver la isla de Mallorca bajo nuestros pies desde una perspectiva única. Una sensación inigualable de paz y libertad nos invadirá mientras el globo se desplaza poco a poco con el viento. Y para que todo sea perfecto podremos brindar con cava o disfrutar de un suculento desayuno o un almuerzo campestre al aterrizar. Además de en Mallorca, la experiencia puede realizarse en Segovia, Barcelona, Toledo, Granada, Burgos... Desde 145 euros.
Vuelo en parapente acompañado
Prepárate para experimentar emoción y diversión en el aire. Este vuelo se caracteriza por ser en un parapente biplaza en el que te acompañará un experto profesional para que no tengas que preocuparte de nada más que de disfrutar. En el momento de despegue liberarás adrenalina y una vez en el aire empezarás a impresionarte del paisaje en un vuelo tranquilo. De la mano de la empresa Parapente Factory sobrevolarás el Parque Natural de La Mussara del pueblo de Arbolí de Tarragona. Además, estarás a 950 metros de desnivel con el mar por lo que tendrás la oportunidad de ver también Salou y Reus de fondo. Si quieres algo más excitante, hay la opción de incorporar acrobacias al vuelo, como las que propone FlySer Aventura en Madrid, sobrevolando hermosos paisajes, vegetación, animales, trincheras de la Guerra Civil y las magníficas vistas desde las alturas igual que si fueras un pájaro. Desde solo 49 euros.
Vuela como Supermán
Sin duda la experiencia de vuelo más auténtica es hacerlo sin nada que te ayude, solo tú mismo y otra persona, si lo deseas. Esto es posible en el Túnel de Viento donde, gracias a la tecnología más avanzada, ahora tenéis la oportunidad de experimentar qué se siente al volar. El aire que generan las turbinas de alta potencia dentro del túnel simulan una caída libre como si se tratara de un salto en paracaídas pero sin él. Durante toda la actividad te acompañará un instructor para explicar una sesión teórica en la que te dará todos los consejos para aprovechar al máximo el momento en el túnel. La experiencia puede compartirse con hasta cinco personas, incluyendo niños mayores de 4 años y se realiza, principalmente, en Barcelona, Windobona Islazul (Madrid), Empuriabrava (Girona) y también, como novedad en Oporto (Portugal). Desde 49 euros. En lo que va de año esta experiencia ha crecido un 300 por 100.
Joaquim Esteve, fundador de Aladinia ha comentado: “Después de haber pasado unos meses muy duros en los que mucha gente ha dejado volar su imaginación ha llegado el momento en el que los que vuelen sean ellos. Al menos eso es lo que hemos podido comprobar en Aladinia, donde hemos visto un espectacular aumento en reservas de experiencias que tienen que ver con volar en el último mes, en las que se busca tanto liberar adrenalina, como en los saltos en parapente, paracaídas o en el túnel del viento, como disfrutar de un momento único en pareja, como el paseo en globo con cava. Y para los más atrevidos, sentir los mandos de una avioneta en las manos”.