Egipto quiere posicionarse como uno de los destinos prioritarios para los españoles en lo que queda de 2021 y consolidarse a lo largo del próximo año. Con ese objetivo, una docena de turoperadores -Avoris, Dynamic Tours, Explora Traveller, Galaxia Group, Grupo Dunas, Image Tours, Mapa Tours, Saraya Tours, Vendeviaje, y Tawy Tours- han vuelto a confiar en Master Flights, empresa especializada en consolidación de vuelos charter a Egipto desde hace más de 22 años, para la programación de sus tradicionales vuelos directos entre Madrid y Luxor, que operarán los lunes y sábados durante todo el año a partir del próximo 2 de agosto.
Egipto es un país seguro que ha sabido controlar la pandemia del coronavirus con éxito. Con una incidencia de solo 6,3 por 100.000 personas y relativamente pocos casos de Covid, en un país que tiene más de 100 millones de habitantes, el país de los faraones trata de dar facilidades a sus visitantes. La totalidad de los profesionales del sector turístico han recibido al menos una dosis de la vacuna. Antes de comenzar con la vacunación se exigía la presentación de una prueba PCR negativa realizada con 72 horas de antelación, control de los aforos, la distancia social y tomar la temperatura a todas las personas en aeropuertos y hoteles. En caso de que un turista contrajera el virus, pasaba la cuarentena en el hotel sin cargos adicionales, las medicinas se entregaban de forma gratuita y, de tratarse de una persona en estado crítico, el paciente era trasladado a los hospitales del país, sin que le cobrasen cargos.
Para Egipto es muy importante el turismo y lo cuida al máximo. Antes de la pandemia, en 2019, Egipto recibió más de 12 millones de turistas y unos ingresos cercanos a los 12.500 millones de dólares, según ha informado Ahmed Youssef, presidente de la Autoridad Egipcia de Turismo. Los datos del año pasado, son mucho más bajos y se han calculado partiendo del 1 de julio, momento en que el país se abrió al turismo de nuevo. Egipto recibió entre un 10 y un 25% de los turistas que tuvo en 2019. En 2021 se estima que pueda llegar a los 6 millones de turistas.
El turismo representa el 12% del PIB de Egipto. Su aportación al país es equivalente a la industria y a la agricultura. Casi 1,5 millones de egipcios trabajan en el sector turístico directa o indirectamente.
Descubrimientos arqueológicos
En los últimos años se han producido numeroso grandes descubrimientos arqueológicos, uno de los motivos que animan a muchos turistas a viajar al país de las pirámides. Uno de los más destacados fue el descubrimiento de una ciudad de 3.000 años de antigüedad cerca de Luxor que se perdió en las arenas de Egipto y que ha sido calificado como uno de los hallazgos arqueológicos más importantes desde la tumba de Tutankamón. El conocido egiptólogo Zahi Hawass, que estuvo hace poco en Madrid, lo calificó como la "ciudad dorada perdida". Es la ciudad más grande de la antigüedad que se ha descubierto en Egipto. Conocida como Aten, fue desenterrada en septiembre de 2020, poco después de empezar la excavación.
El propio Hawass anunció en enero que había encontrado en la necrópolis de Saqqara cientos de sarcófagos y otros objetos funerarios datados en el Reino Nuevo. Al descubrimiento de un taller de momificación del antiguo Egipto y cientos de sarcófagos de madera pintados de vivos colores, la mayoría pertenecientes a la dinastía XXVI (664-525 a.C.), se sumaron los descubrimientos que Zahi Hawass en el templo funerario de la reina Nearit donde también se han descubierto varios pozos funerarios, sarcófagos y momias; un papiro de cuatro metros de longitud, ?estatuas de piedra y madera, estelas, maquetas de barcos y máscaras funerarias.
Otro atractivo importante es el nuevo Gran Museo Egipcio, que se inaugurará en breve y será el mayor museo de Arqueología del mundo, que competirá con el Museo Nacional de la Civilización Egipcia donde el pasado 3 de abril se trasladaron 22 momias reales en un espectacular desfile que fue seguido por televisión por cientos de millones de personas en todo el mundo, y donde se mostrarán decenas de miles de piezas.
Programas muy completos
Aunque cada uno de los turoperadores propone su propio recorrido, hay muchos puntos en común. En general, se vuela directamente a Luxor, y tras la llegada y asistencia se traslada directamente al barco para disfrutar de un magnífico crucero de cuatro días con pensión completa a bordo. El primer día se cruza el Nilo para visitar la Necrópolis de Tebas, visitando el famoso Valle de los Reyes, lugar donde se enterraron los principales faraones del Imperio Nuevo, entre las dinastías XVIII, XIX y XX y lugar donde se halla la célebre tumba del faraón Tutkhamon. También se visita Deir El Bahari conocido como Templo de la Reina Hachepsut y se hace una parada en los Colosos de Memnon, que representan al faraón Amenhotep III. Cruzando a la orilla oriental del Nilo, se visita el complejo de templos en Karnak, levantados por diferentes faraones, como Ramsés III, Taharqa, Seti II, etc. entre la grandeza de los templos de Karnak, destaca la sala hipóstila del templo de Amón, con sus 134 columnas, 12 de las cuales alcanzan los 23 metros de altura. Tras esta fascinante visita se llega al templo de Luxor. Declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1979, está consagrado al dios Amón y Amón Ra. De regreso al barco se zarpa hacia Esna y tras cruzar su esclusa de Esna, continúa la navegación hacia Edfu.
Al día siguiente se visita del Templo de Edfu dedicado al dios Horus, emplazado en lo que durante la época grecorromana se le llamó Apolinópolis Magna. Se trata del segundo templo más grande en Egipto después de Karnak y sin duda uno de los mejor conservados. Al término de la visita continúa la navegación hacia Kom Ombo, dedicado a los dioses Sobek con cabeza de cocodrilo y Haroeris, con cabeza de halcón. El templo fue obra de Ptolomeo VI Filometor (180-145 a. de C.), en los primeros años de su reinado. Luego comienza la navegación hacia Asuán.
El último día de crucero y tras llegara a Asuán se tiene la posibilidad de hacer la excursión opcional a los templos de Abu Simbel. La construcción del templo mayor se atribuye al faraón Ramsés II en el año 1264 a. de C., destacando también el otro templo inferior excavado en honor a su esposa preferida, la reina Nefertari. Con la construcción de la presa de Asuán en 1964 el templo de Ramsés II y el de Nefertari se cortaron pieza a pieza y se reconstruyeron en un lugar próximo a 65 metros más alto, formando dos inmensas cúpulas de hormigón armado. Por la tarde de ese día se podrá disfrutar de un bonito y relajante paseo en faluca, típico velero egipcio.
Llegada a El Cairo
Todavía queda tiempo, antes de tomar el avión a la capital egipcia de visitar el hermoso y emblemático templo de Philae, que lleva el nombre de una isla situada en el río Nilo, a once kilómetros al sur de Asuán. Durante la época ptolemaica y romana se edificó el templo consagrado a la diosa Isis. Pero durante la construcción de la presa de Asuán, la isla de File quedó sumergida por las aguas. Sin embargo, y gracias al patrocinio de la Unesco, los templos fueron desmontados, trasladados y reconstruidos en el vecino islote de Agilkia. Tras la visita, traslado al aeropuerto de Aswan para realizar el vuelo a El Cairo.
En un intenso día se visita lo más interesante de la ciudad y sus alrededores, empezando por las pirámides de Guiza construidas por los faraones de la IV dinastía del Antiguo Egipto: Keops, Kefrén y Micerinos y la única que sigue en pie de las Siete Maravillas del Mundo Antiguo. Por la tarde, visita opcional a la necrópolis de Saqqara, donde gran parte de los faraones y mandatarios del Imperio Antiguo decidieron establecer su lugar de enterramiento y donde se han realizado importantes descubrimientos recientes. Entre las muchas tumbas que se encuentran en toda esta basta extensión, destaca la pirámide escalonada del faraón Zoser (III dinastía). Durante la excursión también se visita Memphis, fundada hacia el 3050 a. de C., por el primer faraón de Egipto, Menes, llegando a convertirse en la capital del Imperio Antiguo y del I Nomo del Bajo Egipto. Entre sus restos destaca la famosa Esfinge de Alabastro y un coloso de Ramsés II.
Queda mucho por ver en El Cairo, peor lo mejor es que cada uno elija lo que prefiera: museos, compras, comidas típicas, contacto con los cordiales egipcios... Quien prefiera que se lo den hecho, tiene la posibilidad de una visita opcional organizada de día completo a la ciudad con almuerzo incluido en restaurante local, incluyendo el Museo de Arte Egipcio, la Mezquita de Alabastro con la Ciudadela de Saladino y el Gran Bazar de Khan el Khalili.
Y con el recuerdo en la retina y en el alma de un país que a nadie deja indiferente, al día siguiente se regresa en vuelo directo de Egipto a España, prometiéndose regresar cuanto antes a este país milenario.