Un trabajo de los profesores de la Escuela de Arquitectura y Edificación de la UPCT Fernando García y Ricardo Carcelén cifra en 7 residentes por metro lineal de playa la ocupación durante el verano de las zonas turísticas de costa de la Región de Murcia. El dato ha sido compartido en un hilo de Twitter de cara a las medidas que se habrán de adoptar para controlar los aforos y las distancia interpersonal durante el periodo veraniego.
Los investigadores resaltan que la presión ocupacional es muy distinta en las diferentes zonas de costa de la Región y abarca desde los 15 y 14 residentes por metro lineal de playa en Águilas y el Arco Norte del Mar Menor hasta los menos de 4 residentes en la zona norte de La Manga. “Atendiendo a los datos de primera residencia, fuera de temporada el distanciamiento social podría mantenerse fácil: 1,5 personas por metro de playa. Pero, en verano se complica. Más de 7 personas por metro lineal de playa, sin contar visitantes diarios”, puntualiza Fernando García, quien sugiere la posibilidad de establecer turnos para posibilitar el uso de la playa para todos.
“La playa ha sido el fresco objeto de deseo del modelo turístico desde los años 60, el principal reclamo para los veraneantes”, señala el profesor de Urbanismo. “El resultado ha sido la ocupación de 45 millones de metros cuadrados y la construcción de 18,5 millones de metros cuadrados en los tres kilómetros más cercanos a nuestras costa”, explica.
La ocupación llega a superar los 1.000 metros cuadrados por metro lineal de playa en el Arco Norte del Mar Menor y está también muy cerca de doblar la media regional de 546 metros cuadrados en Águilas. Los metros cuadrados construidos son de media 222 en las llanuras de costa regional, con un máximo de 430 en el Arco Norte y un mínimo de 98 metros en la parte norte de La Manga, donde se da prácticamente la equivalencia de una casa por metro de playa. “No es mal lema”, apunta Fernando García.
El estudio, que fue presentado por García y Carcelén en el XXVI Congreso de la Asociación Española de Geografía, se realizó antes de la crisis del coronavirus como parte de un análisis territorial de las formas del turismo en la Región de Murcia, ha sido recuperado ahora por sus autores como reflexión sobre el distanciamiento social, pero podría ser también de utilidad para el Plan de Ordenación Territorial de la Cuenca Vertiente del Mar Menor, que recientemente ha licitado la Consejería de Fomento e Infraestructuras de la CARM.