El calentamiento global alarga la temporada de alergia al polen
El aumento de la contaminación, tras la vuelta al trabajo presencial en las principales ciudades españolas, perjudica especialmente a los niños, más sensibles a los problemas respiratorios y alérgicos. Así lo advierte la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica (SEICAP) al abordar el riesgo para la salud que supone la polución relacionada con el cambio climático.
Según un informe elaborado por ISGlobal, Madrid lidera el ranking actualizado de ciudades europeas que tienen mayor número de muertes atribuibles al dióxido de nitrógeno, con 1.966 muertes evitables según los niveles de la OMS 2021, mientras que Barcelona se encuentra en sexto lugar. Este compuesto nocivo para el ser humano es generado, principalmente por el tráfico motorizado. En cuanto al nivel de partículas N02 anual, en la capital de España es de 39.2 microgramos por metro cúbico al año, cuando 10 es el nivel idóneo recomendado y 40 el máximo que no se debería sobrepasar.
Para revertir esta situación, la SEICAP recomienda "contribuir, tanto a nivel particular como familiar, a generar menos residuos contaminantes y así prevenir problemas respiratorios y alérgicos en niños y adolescentes".
El doctor Luis Moral, coordinador del Grupo de Trabajo de Alergia Respiratoria y Asma de la SEICAP, aconseja "consumir el agua y los productos que realmente se precisen, evitando el despilfarro por la carestía y la contaminación que conlleva ese comportamiento. Dentro de los domicilios deben evitarse las fuentes de contaminación, y hay que elegir el trasporte no contaminante, si es posible (andar, bicicleta...) o los trasportes públicos frente a los particulares".
Entre las fuentes más contaminantes en ciudades el experto enumera las procedentes de "la combustión de combustibles fósiles para la generación de
energía, el transporte, la cocina residencial, la calefacción y la incineración de desechos".
La contaminación del aire es la causa del 50% de las infecciones respiratorias bajas agudas en países de rentas bajas y medias, según datos de la OMS. Además, está relacionada con el aumento y la gravedad de alergias respiratorias en los más pequeños y se asocia con el desarrollo de asma infantil.
Esta contaminación implica también un aumento de la temperaturas, provocando que la floración comience antes. Según los resultados de un estudio publicado en la revista PNAS, las temporadas de alergias son cada vez más largas, hasta el punto de que la temporada de alergia primaveral se habría alargado hasta veinte días en los últimos treinta años.
Desde SEICAP advierten que este fenómeno deriva en una mayor cantidad de polen durante más meses al año. "Además de ampliar sus zonas de distribución, está aumentando la productividad de polen por planta, la dispersión y el periodo de polinización. Así, los sujetos sensibles tienen síntomas más graves y duraderos debido a la mayor concentración polínica y al mayor tiempo de polinización", alerta la doctora Cristina Ortega, coordinadora del Grupo de Trabajo de Página Web de la sociedad científica.
El cambio climático, la mayor amenaza para la salud de los niños
Según un estudio reciente publicado en Int J Environ Res Public Health, el cambio climático es en la actualidad una de las amenazas más graves para la salud de los niños de todo el mundo. El cambio climático, la contaminación y el polen están íntimamente relacionados y están impactando en la salud respiratoria de los menores, más vulnerables que los adultos pues tienen tasas de ventilación más altas, un sistema inmunológico todavía en desarrollo y vías respiratorias más estrechas.