UGT reivindica el diálogo social como herramienta para articular políticas eficaces en materia de empleo y promoción económica, en un contexto en el que se intensifican las incertidumbres sobre la economía global y se corre el riesgo de dejar atrás a los colectivos con mayores dificultades de inclusión laboral.
Con respecto al MES ANTERIOR, la Región de Murcia registra 313 parados menos, lo que supone un descenso del 0,39%, siendo el número total de parados registrados en las oficinas de empleo 80.254 personas.
Por edades y en términos relativos, el paro aumenta un 3,20% entre los menores de 25 años y disminuye un 0,80% entre los trabajadores del resto de edades. Por sexos, el paro desciende un 0,25%, entre los hombres y un 0,48% entre las mujeres. El número de parados extranjeros desciende un 1,74%, mientras que el de parados españoles lo hace un 0,19%. Por sectores, el paro retrocede en Agricultura (-2,57%) y Servicios (0,54%). Aumenta, por el contrario, en el colectivo sin empleo anterior (1,42%y ligeramente en Construcción (0,05%).
En TÉRMINOS INTERANUALES, la Región de Murcia registró en marzo, 3.175 parados menos, lo que implica un descenso relativo del 3,81%, descenso que es 1,58 puntos porcentuales inferior al registrado a nivel nacional (-5,39%).
En comparación con los registros de hace doce meses, el desempleo desciende en todos los colectivos, a excepción de los menores de 25 años, entre los que aumenta un 5,81%. Por sectores, el paro disminuye en todos ellos haciéndolo muy significativamente en Agricultura (-10,63%), Industria (-6,92%) y Construcción (-6,71%).
En cuanto a la contratación, se registraron 2.185 contratos menos que el mismo mes del año pasado, un 4,88% menos en términos relativos, mientras que en el conjunto nacional crecieron un 3,84%. Los contratos indefinidos representaron en este mes de marzo el 59,76% del total, reduciéndose, en consecuencia, la tasa de temporalidad en la contratación hasta el 40,24%.
Por su parte, la tasa de cobertura del sistema de protección por desempleo se situó, en febrero de 2025, en el 70,94% a nivel nacional y en el 70,54% a nivel regional.
ANTE ESTOS DATOS, DESDE UGT REALIZAMOS LA SIGUIENTE VALORACIÓN
Según los datos publicados hoy por el Ministerio de Trabajo y Economía Social, el número de personas paradas en la Región de Murcia se situó, en marzo, en 80.254 personas, cifra que supone un descenso del 0,39% respecto a febrero y, a la vez, un descenso del 3,81% respecto a marzo de 2024.
Los datos de afiliación, por su parte, reflejan un crecimiento de la ocupación cifrado en 5.995 personas respecto al mes pasado y 14.248 respecto a los registros de hace doce meses.
En opinión de UGT la bajada del paro en la región, aunque positiva, es inferior a la experimentada a nivel nacional, lo que evidencia las mayores dificultes que está encontrando nuestro territorio para reducir con la intensidad deseada un desempleo que se enquista o incluso se incrementa este mes, en los colectivos más vulnerables, como los jóvenes.
Por ello, la creación de empleo, aunque se mantiene robusta (la seguridad social suma 14.248 nuevas afiliaciones en los últimos doce meses) tiene, en opinión de nuestro Sindicato, que dirigirse adecuadamente, desde las políticas públicas, a buscar la inclusión laboral de estos colectivos. La negociación de la nueva Estrategia regional para la reactivación del empleo de calidad o el nuevo Plan Industrial son ámbitos propicios para ello que urge poner en marcha, sobre todo, teniendo en cuenta las incertidumbres que en estos momentos rodean nuestra economía, derivadas de los conflictos bélicos o la guerra arancelaria iniciada por EEUU.
Y, en estos momentos, en los que la participación institucional es moneda de cambio para aprobar los presupuestos regionales, debemos reivindicar el diálogo social y su utilidad para poner en marcha políticas eficaces y cercanas a la necesidad de las personas trabajadoras y las empresas, teniendo como horizonte el refuerzo de las políticas activas, un reparto más equitativo de la riqueza y seguir profundizando en la mejora la de la calidad del empleo, con medidas como la reducción de la jornada laboral y el encarecimiento del despido.