En promedio, en 2022 la subida se situó en el 8,8% (8,4% Es), la más alta desde 1984.

Fuertes subidas en productos básicos como lácteos, huevos o patatas.

Descontando alimentos y energía, los precios aumentan un 7,7%.

La inflación se mantiene muy elevada pese a la leve moderación de los últimos meses.

La inflación de la Región de Murcia registró por quinto mes consecutivo una leve parada en su continua senda ascendente. En particular, el Índice de Precios de Consumo (IPC) alcanza una tasa de variación interanual del 6,3%, frente al 7,4% de noviembre, y frente al 5,7% nacional.

En diciembre, las mayores presiones inflacionistas provinieron de  alimentación, menaje y hostelería, aunque los aumentos elevados de precios siguen siendo la tónica general, pues seis de los doce grupos que componen la cesta de la compra registraron variaciones anuales superiores al 2% (tasa de referencia de la inflación general establecida por el Banco Central Europeo). En el caso de Alimentos y bebidas no alcohólicas, el encarecimiento medio alcanzó el 16,6% (una décima más que en noviembre), resultando especialmente grave que algunos productos de primera necesidad alcanzaran tasas superiores al 30%, como  azúcar (+45,1%), huevos (+41,5%), leche (+39,7%), aceites (+35,2%) o patatas (+31,9%). Por encima del 20% se situaron productos lácteos  (+26,4%), cereales (+21,8%) y agua mineral, refrescos  y zumos (+21,1%).  El segundo grupo con mayor variación anual de precio fue Menaje (+10,7%), seguido de Hoteles, cafés y restaurantes (+7,6%). Dos de los grupos que habían registrado mayores alzas en meses anteriores contienen sus avances. Transporte lo hizo hasta el +3,9% (con un +4,2% en carburantes en un mes en el que todavía estaba vigente el descuento de 20 céntimos aprobado por el Gobierno). Y gastos asociados a Vivienda hasta el -6,1% (con un -17,9% en electricidad), en lo que constituye la única caída por grupos junto a la de Comunicaciones (-1,9%).  

En todo caso,  si se excluyen del cálculo los elementos más volátiles como alimentos no elaborados y energía, se tiene que la denominada inflación subyacente aumentó siete décimas, hasta el 7,7% -frente al 7,0% nacional- situándose en niveles preocupantes no vistos en décadas .

En definitiva, la inflación regional cerró la anualidad con una inflación muy elevada, del 6,3% en el mes de diciembre que resulta incluso mayor si se atiende a la media de los doce últimos meses: 8,8%, 4 décimas por encima de la media nacional y la más alta desde 1984 (cuando alcanzó el 10,7%). En consecuencia, se precisaría de medidas de choque adicionales para que no se vea aún más limitada la capacidad de consumo de los hogares -sin duda los más golpeados hasta ahora por el repunte de los precios-, pues se espera que la inflación continúe por encima de los valores deseados también durante todo 2023.