Arriverderci Italia. La decimoséptima edición de La Mar de Músicas dedicada al país trasalpino echa el cierre mañana sábado 23 de julio con uno de los tres conciertos que el combo catalán Ojos de Brujo está realizando este verano para decir un hasta luego en los escenarios. La banda estará acompañada por el rey de la rumba catalana, Peret, Miguel Campello, cantante de El Bicho y Roldán de Orishas. El senegalés Cheik Lô se subirá antes al escenario del Auditorio Parque Torres en el que será el estreno y único concierto en España de su disco Jamm. El fin de fiesta correrá a cargo de El Guincho, ya de madrugada. Las entradas para la clausura de La Mar de Músicas cuestan 25 Euros.
Hip hop y flamenquito. Ojos de Brujo son la marca registrada de esa mezcla callejera de palos flamencos con hip hop, drum & bass, música india o cubana, funk y, cómo, no, rumba catalana. La rumba catalana, maravilloso invento con más de medio siglo de historia, está de nuevo muy viva y ha llevado a don Pedro Pubill Calaf, más conocido como Peret, a las aulas del Conservatorio de Liceo de Barcelona para dar un curso introductorio. Con el cambio de siglo surgió en Barcelona el mestizaje sonoro de Ojos de Brujo. Se cumplen diez años del primer disco, aquel 'Vengue' para el que se reunieron músicos que tocaban entonces con Amparanoia o Macaco o acompañaban a Rosario Flores o a Raimundo Amador.
Después de 'Vengue' llegaron títulos como 'Barí' –'joya' en caló- (2002), que les permitió salir de gira por medio mundo, 'Techarí' –'libre' en caló- (2006), 'Aocaná' –'ahora' en caló- (2009) o 'Corriente vital' (2010) que conmemora el décimo aniversario de OdB con reconstrucciones de éxitos como 'Corre Lola corre', y algún que otro inédito. Con invitados como Bebe, Amaral, Jorge Drexler, Manolo García, Estopa, Chicuelo, Najwa Nimri, Roldán (de Orishas), Miguel Campillo (de Elbicho) o La Troba Kungfu y producciones de Nitin Sawhney, Juno Reactor, Bob Bennozo... Acostumbrados a autoproducirse decían en Mondo Sonoro que "ha sido parecido a ver un cocinero hacer un plato totalmente distinto al tuyo, pero con los mismos ingredientes. Una pasada".
Suena todo a despedida. A gira de adiós. Y así es. Aunque Ojos de Brujo, como dijo Elbicho, se paran, pero no se separan. Han decidido, tras esta gira que durará prácticamente un año, tomarse un respiro, darse un tiempo, y probar suerte en cosas nuevas
Cheik Lô
Si hay un músico africano que no se parece a ningún otro probablemente sea Cheikh Lô. Espíritu libre. "Cuando canta su voz me inunda", dijo Youssou N´Dour, que fascinado produjo su primer disco hace casi dos décadas.
Este senegalés nacido en 1955 en Burkina Faso (nombre que se traduce por 'La tierra de los hombres íntegros') toca un híbrido único de 'mbalax', reggae, guajira cubana, rumba congoleña y r&b norteamericano. Lo atribuye a sus comienzos musicales con el grupo Volta Jazz en su ciudad natal de Bobo-Dioulasso, cercana a las fronteras de Mali y Costa de Marfil. Allí, los dioulas, los bambaras, los congoleños... tocaban unos con otros. Algo excepcional porque en África un músico suele cantar generalmente para su propia etnia. Cheikh Lô recuerda que al llegar a Senegal, la tierra de sus padres, los demás músicos le decían que su estilo no iba a funcionar. A él le traían al fresco los avisos agoreros porque siempre se ha considerado un músico panafricano.
Ahora vuelve a La Mar de Músicas con las canciones de 'Jamm', otro disco para el sello World Circuit, que le sitúa sin discusión entre los grandes músicos del continente africano. 'Jamm' –que significa 'Paz'- es sólo su cuarto disco.
El Guincho
A El Guincho le toca cerrar esta edición de La Mar de Músicas. Lo hará en el Castillo Árabe, bien avanzada la noche del sábado 23 de julio, después de que se haya anunciado por megafonía el nombre del país invitado el próximo año. El Guincho es de los pocos que repite en el festival ya que actuó, y en este mismo escenario, en la edición de 2008.
Le han otorgado el premio Ojo Crítico, de Radio Nacional de España, por "su singularidad, su creatividad, su proyección y su influencia internacional" y, en abril, arrasó en los premios de Rock de Lux como mejor disco nacional del 2010 ('Pop negro'), mejor canción ('Bombay') y mejor vídeo nacional –se lo realizó una productora barcelonesa de moda-. "Pop Negro es pop grande y reventará en Toledo, Kioto, Berlín, Singapur, Los Ángeles o Ciudad del Cabo", se pudo leer en la revista.
Desde que salió 'Alegranza', en 2007, este grancanario de 26 años, Pablo Díaz-Reixa, antiguo batería de la banda Coconot, más conocido como El Guincho, no deja de recibir parabienes. 'Alegranza', del que se han publicado remezclas de algunas canciones a cargo de Architecture in Helsinki, Delorean o Prins Thomas, y que le valió estupendas críticas en medios anglosajones como The Washington Post y Pitchforkmedia, era su segundo disco. El primero, 'Folías', había salido en 2006 sin pena ni gloria en el sello casero DC/Luv Luv.
En una entrevista para elpais.com explicó que "en Canarias, cuando acabas el colegio, tienes dos opciones: o te vas a Madrid a estudiar administración y dirección de empresas, o te vas a Barcelona a estudiar algo raro. Yo, como el 10% de los raritos de la isla, me fui a Barcelona a estudiar comunicación audiovisual". Así se lo contaba en marzo de 2008 a Xavi Sancho.
'Alegranza' fue tomando forma desde un viejo Mac portátil en cafés de Barcelona con wi-fi porque Pablo no disponía de conexión a Internet en casa. Y con esos escasos recursos –confesó que no tenía casi ni para comer-, desde las influeuncias indies, psicodélicas y tropicalistas, con capas y más capas de samplers, elaboró un disco de ritmos machachones que se debería, según él, escuchar con cascos porque la ubicación física de cada pista es importante. Llega El Guincho, sampleando la música latina más tropical y la africana, para una propuesta bailable que lleva de viaje por medio mundo.