La Asociación de Consumidores y Usuarios en Red, CONSUMUR, tras las declaraciones ayer de la Presidenta de Adif, María Luisa Dominguez, en las que confirmó la decisión del cierre total de la línea Murcia-Lorca-Águilas y parcial entre Chinchilla (Albacete) y Murcia durante, al menos, tres años, muestra su preocupación al entender que esta medida va a afectar gravemente a los usuarios del transporte ferroviario, además de tener también un importante impacto medioambiental.

CONSUMUR, como organización impulsora de la creación, en 2018, de la Plataforma en Defensa del Ferrocarril de la Región de Murcia, viene manifestándose públicamente sobre esta decisión de Adif desde el pasado mes de junio, estando presente en reuniones con partidos políticos y representantes de municipios afectados.

Igualmente, la ciudadanía está adoptando un papel activo y crítico, a través de diversas movilizaciones que ya han tenido lugar en las estaciones de tren de Murcia, Totana, Lorca y Águilas. El próximo jueves está prevista otra en Librilla.

No obstante, CONSUMUR lamenta que Adif continúe con su decisión de supresión de los servicios ferroviarios. Una decisión que creará graves problemas de movilidad ciudadana, al trasladar a más de 1.200.000 viajeros al año que utilizan los trenes de cercanías, a la carretera, igualmente podrá tener como consecuencia la pérdida de empleo en dichas empresas ferroviarias y de las empresas auxiliares, como vienen denunciando los sindicatos.

Para la organización, resulta inadmisible que en el actual contexto de cambio climático y crisis energética, además de en el Año Europeo del Ferrocarril, se adopte la decisión de suprimir un servicio básico como es el transporte ferroviario, utilizado diariamente por miles de ciudadanos para acudir a su centro de estudios o trabajo, y que representa una pieza clave en la descarbonización del transporte, dado que es uno de los medios de transporte más eficientes energéticamente y con menores emisiones.

La alternativa del transporte en autobús, del que todavía se desconoce su funcionamiento, no contribuirá a paliar las consecuencias de la supresión de los servicios, dado que el aumento del tiempo de los recorridos, hasta 40 minutos más, provocará un efecto disuasorio en los usuarios.

Las consecuencias que traerá la supresión de los servicios no se reducen al desplazamiento de los pasajeros, sino que albergan un espectro más amplio, como es el impacto medioambiental y el aislamiento al que se somete una parte importante de nuestro territorio, dado que muchos usuarios optarán por medios de transporte privados.

CONSUMUR va a seguir manteniendo, como hasta la fecha, un papel activo y reivindicativo, solicitando a Adif y al Ministerio que replanteen la decisión adoptada, y llamando a la movilización ciudadana, dado que, como declaraba recientemente Roberto Barceló Vivancos, Presidente de CONSUMUR, “Sólo la presión ciudadana sería capaz de modificar la decisión errónea que ha tomado tanto Adif como el Ministerio. Es importante que la ciudadanía, sobre todo de los municipios afectados de cercanías, desde Murcia a Águilas, vaya adquiriendo conciencia plena y, por tanto, desarrollando una labor mucho más intensa de cara de cara a los próximos meses que van a ser decisivos”