En el registro del domicilio del arrestado se han intervenido cuatro teléfonos móviles, dos ordenadores y dispositivos de almacenamiento localizándose gran cantidad de archivos de contenido sexual
La investigación comenzó tras la denuncia que interpuso el progenitor de un menor en Sevilla tras descubrir archivos multimedia de contenido sexual en el teléfono de su hijo. La víctima manifestó que había mantenido una relación virtual durante varias semanas con un varón que se hizo pasar por menor a través de redes sociales. El joven contacto con la víctima comenzando a hablar sobre videojuegos a través de una red social pero, posteriormente, los temas trascendieron al plano personal y empezó a recibir imágenes de contenido sexual siendo incitado para que compartiera el mismo tipo de archivos. Además el detenido trató de conocer presencialmente al menor con el que consiguió concertar una cita que no llegó a materializarse por circunstancias ajenas a su voluntad.
Se ofrecía en anuncios como cuidador de menores
Las pesquisas de los agentes detectaron que el presunto autor de los hechos se ocultaba tras varios perfiles de redes sociales en los que simulaba ser menor de edad. Una vez que lograron identificar al titular de los perfiles en redes, comprobaron que tenía antecedentes por abusos sexuales a menores y que había insertado anuncios en la web en los que se ofrecía como cuidador de niños.
Detención y registro domiciliario
Todo ello llevó a la urgente localización del varón que finalmente fue detectado en un municipio riojano donde se llevó a cabo una entrada y registro domiciliario que permitió la detención del individuo y la intervención de cuatro teléfonos móviles, dos ordenadores, un disco duro, un pendrive y una videoconsola. El análisis de estos dispositivos evidenció que el detenido contactaba con menores a través de varios perfiles de redes sociales para conseguir imágenes sexuales. Además se detectaron gran cantidad de vídeos de carácter pedófilo y fotografías de niños desnudos que el arrestado presuntamente había captado sin consentimiento en la playa, pudiendo detectar además que se encontraba en grupos de conversación de mensajería instantánea en los que se intercambiaba material de contenido sexual de menores.