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Las marcas que cambian sus logos según las últimas tendencias son 90% menos efectivas

Según un reciente estudio de Warc, muchos de los cambios realizados con este enfoque generan marcas más insulsas y menos representativas. Así, el desafío de las empresas es buscar crear marcas que se mantengan vigentes sin importar las modas del momento.

Olga Llopis, Socia Directora de Comuniza, agencia especializada en branding, explica que “el diseño atemporal no se trata de seguir una tendencia específica, sino de crear algo que sea relevante y coherente a lo largo del tiempo”.

Foto: Freepik

El mundo avanza a toda velocidad, tanto por innovaciones tecnológicas como por tendencias visuales. Al mismo tiempo, las marcas necesitan identificarse visualmente para hacerse reconocibles por sus diferentes audiencias en cada situación en la que sean visibles. Por ello, cada vez más marcas están en la búsqueda de la atemporalidad en la construcción de su identidad visual.

Según un reciente estudio de Warc, algunas marcas han utilizado la última moda digital en la construcción de su logotipo, lo que ha hecho que quedara anticuada rápidamente, generando marcas más insulsas y menos representativas. En este sentido, se estima que el 90% de las marcas que han rediseñado sus logotipos han sido menos efectivos que los antiguos.

“El punto clave para reducir esta caída es entender bien los activos de marca en un proceso de cambio”, explica Olga Llopis, Socia Directora de Comuniza, agencia especializada en branding. Y agrega: “Con este enfoque de conectar con elementos propios, marcas como Toyota o Burger King, han encontrado la fuerza del enfoque atemporal en la construcción de identidades de marca, porque captura las fortalezas internas reales y evita destruir valor”.

En este contexto, los expertos en branding reconocen la importancia de crear marcas que trasciendan las tendencias y se mantengan relevantes a lo largo del tiempo. “La función de un logotipo no es transmitir conceptos muy complejos, sino identificar una organización a lo largo del tiempo. Y esta identificación necesita consistencia en el uso, incluso en contextos innovadores y tecnológicos que sucedan en el futuro”, suma Llopis.

Para Llopis, “la clave está en evitar seguir a la multitud, porque los diseñadores se inspiran en otros diseñadores y así es como se desarrolla una tendencia, como sucede en el sector de la moda, que ha experimentado un fuerte cambio hacia logotipos minimalistas de paloseco”.

Al mismo tiempo, la marca necesita originalidad para que sea distintiva y capacidad de reconocimiento para que sea recordada y reconocida fácilmente por el público. Estos elementos deben, mantener una coherencia visual para establecer una conexión visual entre la identidad visual y las percepciones asociadas a la organización.

Por este motivo, el deseo de atemporalidad en el diseño de marcas está ganando importancia. “El diseño de marcas atemporales se ha convertido en un desafío constante para nosotros como profesionales del branding, pero también en una oportunidad para establecer una presencia sólida y duradera en el mercado. El desafío es tener la capacidad de crear marcas que trascienden las modas y perduran en el tiempo como un objetivo cada vez más valorado en la industria”, cierra la experta.

La atemporalidad para disparar los activos con el diseño de marca

La atemporalidad en el diseño de marca es clave para asegurar que los activos de una empresa se mantengan relevantes y fuertes a lo largo del tiempo. Ello permite a las marcas evitar la obsolescencia y establecer una presencia sólida en el mercado.

“La simplicidad en el diseño de marca permite que los activos de una empresa se destaquen y sean fácilmente reconocibles a lo largo del tiempo”, cuenta Olga Llopis. “La implementación de un enfoque atemporal en el diseño de marca implica una visión estratégica a largo plazo. Es un proceso que requiere investigación, comprensión de la esencia de la marca y la identificación de los elementos que la hacen única”, agrega la experta.

Así, la creación de una marca atemporal implica un compromiso de inversión a largo plazo, donde los beneficios a largo plazo superan con creces los costos iniciales. “Al adoptar la simplicidad y una visión estratégica a largo plazo, las marcas pueden asegurarse de que sus activos mantengan su fuerza y relevancia en un entorno en constante cambio”, finaliza la experta en branding y diseño.

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