Los influencers católicos hacen su propuesta al Sínodo: poner en marcha una pastoral digital para esta nueva “tierra de misión”
244 misioneros digitales han elaborado un documento en el que destaca que el 67% de los católicos encuestados se sienten en sintonía con el papa Francisco
“Cuanto más formados estemos, más ayudamos a que el Espíritu Santo siga actuando también en internet”, ha dicho Xiskya Valladares
La iniciativa ‘La Iglesia te escucha’, nacida de la mano de la Red Informática de la Iglesia en América Latina, ha presentado ante la Secretaría General del Sínodo un documento con la síntesis de los resultados obtenidos por una encuesta elaborada, durante dos meses y medio, por 244 influencers católicos a través de sus redes sociales. El texto reivindica, de esta manera, que la red puede ser un “canal formativo de valor y futuro” que puede servir como vía de comunicación para la evangelización.
“La web permite llegar a los pliegues de tantas vidas del Pueblo de Dios que muestran sentirse perdidos”, asegura el documento. “Lo digital, como cultura, como lugar de encuentro, como medio de diálogo, como forma de educar e informar, ha demostrado ser valioso durante este proceso de escucha y consulta”, asevera. Y, precisamente por ello, se muestra la necesidad de elaborar “una pastoral digital de manera orgánica, sistemática e institucional” que impulse la comunión, la participación y misión, además de una reflexión desde la Teología y el Derecho Canónico “como se hace con los catequistas”, para que los influencer “sean y se sientan parte del Cuerpo y de la Misión de la Iglesia”.
“Ahora sabemos que un 30% de los que nos siguen no van a la Iglesia, pero están siguiendo a un misionero digital”, indica Xiskya Valladares, religiosa de la Pureza de María y una de las influencer que ha participado en la iniciativa. “Cuanto más formados estemos, más ayudamos a que el Espíritu Santo siga actuando también en internet”, insiste.
“El hecho de que el 30% de los que han participado en el cuestionario de consulta no sean creyentes, o sean agnósticos o alejados de la Iglesia, significa mucho para la Iglesia, significa que en estos influenceres/misioneros digitales encuentran una voz amiga en la que confían y por la cual les llega la caricia de Dios”, señala Lucio Ruiz, Secretario del Dicasterio para la Comunicación en el Vaticano.
Resultados del sondeo
Para la elaboración del documento han sido necesarios 110.000 cuestionarios, 115 países y siete idiomas, y ha dado lugar a más de 150.000 propuestas sinodales. Los encuestados, con una media de edad de 40 años, han sido tanto personas que se declaran católicas o practicantes como no creyentes. Por su parte, de los influencers que han formado parte de la iniciativa el 27% son sacerdotes; un 10%, religiosas; y un 63% son catequistas y laicos comprometidos.
Entre los resultados de esta consulta, destaca que el 67% de los católicos encuestados se sienten en sintonía con el papa Francisco, y piden a la Iglesia cambios como los que propone el Pontífice. Dentro de los distintos tipos de personas alejadas, el “principal problema” que se encuentra es que, en muchos de los casos del 26% de creyentes que no practica, es porque “se han visto juzgados y no acogidos por la Iglesia”.. Además, el 84% de las personas consultadas que siguen a influencers católicos en redes sociales expresa “haber sentido un encuentro personal con Dios”, y en dos tercios de las personas consultadas, su relación con la Iglesia se establece a través de amigos creyentes.
Por otro lado, el 37% de los encuestados alza la petición de “una Iglesia ejemplar y valiente en sus estructuras, actitudes y un modo de proceder”. Del mismo modo, las redes reclaman “sacerdotes y obispos más cercanos y abiertos a la participación”, siempre desde un diálogo “sin prejuicios” con la sociedad. De hecho, una de las conclusiones a las que llega el documento es que “los debates sobre el ejercicio de la sexualidad (separados/divorciados vueltos a casar, personas con atracción al mismo sexo, etc.), genera conflictos intensos entre católicos con distintas interpretaciones”.
En este sentido, un 26% de los consultados piden a la Iglesia que haga hincapié en su deber de “orientar una realidad confusa y cambio acelerado”. “Se repite constantemente la petición de no juzgar, en particular a las personas en situaciones de pareja irregulares, o por su orientación sexual, defendiendo la dignidad de toda persona, como lo hacía Jesús”, subraya el documento aglutinador, incidiendo en la necesidad de ofrecer respuestas “con capacidad de diálogo y aportando la verdad de Cristo”. Y, sobre todo, el “continente digital” reclama a la Iglesia que hable y actúe con claridad “ante lo que aparece como injustificable, como son la pedofilia, los abusos sexuales, desprecio de las mujeres, corrupción, etc.”.
Del mismo modo, un 17% de los encuestados creen necesario que los cristianos se comporten de un modo “más auténtico” con los otros, y se reclama, asimismo, un mayor compromiso con el cuidado de la Casa Común. Por otro lado, en cuanto a la liturgia, el 20% considera que las misas son “aburridas”, lo cual no facilita que sean lugares que “iluminan y acompañan la vida”. Urge, por ello, “facilitar la relación personal y comunitaria con Dios”.
En cuanto a las sugerencias de cara al futuro, de las 13 ofertadas por los encuestadores, los participantes subrayan tres como las más importantes:
Fomentar la espiritualidad: silencio, contemplación
Acompañar-Asistir-Atender: a parejas, familias, personas separadas/divorciadas, en su vida y sexualidad; pobres, migrantes, grupos LGTB, etnias originales, presos, etc.
Renovarse-salir-participar: actualizar su forma de educar a todos los niveles. Impulsar el voluntariado y actividades con jóvenes. Promover la igualdad de las mujeres en sociedad e Iglesia, participar más del mundo digital. Puntos de encuentro con periodistas y científicos.