El universo FinTech exige ajustes en el marco regulatorio para garantizar su relevancia y eficacia. Los cambios normativos han de abordar las necesidades reales y encontrar un equilibro entre los beneficios y los riesgos que aportan las nuevas tecnologías
La gestión eficiente en materia de riesgos, según GDS Modellica requiere de los mejores datos posibles (Big Data), análisis predictivos y gestión de decisiones
La innovación tecnológico-financiera ha sido clave para abordar con éxito la resiliencia, capacidad operativa y eficiencia del sector financiero al ofrecer una mayor calidad, cantidad, accesibilidad e inmediatez de los servicios financieros a los ciudadanos. Nuevos tiempos, nuevos modelos, nuevos actores y nuevos riesgos. La banca tradicional ha visto irrumpir en su "nicho de mercado" nuevos actores no financieros capaces de ofrecer servicios bancarios más flexibles y adaptados.
El auge de los servicios financieros digitales ha sido posible gracias al cambio de comportamiento de los consumidores en un sector cada vez más interconectado e interdependiente, donde las amenazas cibernéticas y riesgos de estabilidad han aumentado notablemente. Cualquier elemento del nuevo ecosistema puede servir de puerta de entrada y comprometer la seguridad. No es posible abordar estos riesgos con las mismas reglas de proporcionalidad o gradualidad que rigen para otros de diferente tipo. En el nuevo sistema financiero se ha desagregado la cadena de valor, la oferta y la demanda; en el conviven productos, servicios, modelos de negocio y operadores heterogéneos con riesgos y oportunidades muy específicos Internos, externos o transversales. Resulta imprescindible identificar los puntos críticos del sistema financiero en materia de riesgo y seguridad.
El marco regulatorio es un factor determinante en el desarrollo de las FinTech, y en las decisiones de inversión de los operadores a la hora de acceder a los diferentes mercados. Es fundamental establecer una estrecha cooperación entre reguladores y supervisores tanto transversal (entre las autoridades de distintos mercados sectoriales) como internacionalmente (entre países y bloques económicos). El principal desafío al que se enfrentan los reguladores y supervisores del mercado fintech son la búsqueda de un equilibrio estable que maximice los beneficios de la innovación financiera y minimice los riesgos. Además del anterior, otros retos relevantes son la necesidad de:
Cooperar en materia de privacidad de la información personal.
Protección del consumidor.
Defensa de la competencia.
Protección ante amenazas cibernéticas adquieren especial relevancia en un entorno crecientemente digital.
Abordar los riesgos cibernéticos de manera conjunta y desde una óptica global.
La transformación del universo FinTech, tras los cambios en las prácticas del mercado, exige poner en marcha nuevas medidas y ajustes en el marco regulatorio existente para así poder atender a las necesidades reales y garantizar su relevancia y eficacia al incorporar las nuevas tecnologías. Regulación y supervisión han de encontrar equilibrio para maximizar los beneficios que las nuevas tecnologías financieras aportan y la prevención y mitigación de sus riesgos, tanto individuales como sistémicos.
Una apuesta ante el riesgo es GDS Modellica, empresa que proporciona software, análisis decisionales y técnicas de aprendizaje automático para gestionar el riesgo, combatir el fraude y construir relaciones rentables entre las empresas y sus clientes. Así lo expresa Antonio García Rouco director de la compañía, "una buena política de gestión de riesgo de crédito requiere de tres claves decisivas: los mejores datos posibles (Big Data), análisis predictivos y gestión de decisiones. La analítica y la aplicación de nuevas tecnologías en nuestras soluciones permite simplificar las prácticas de gestión de riesgos a la vez que obtener un sólido retorno de inversión". Con sus soluciones, señala García Rouco, "las empresas tienen la posibilidad de anticiparse a los riesgos y gestionar sus decisiones con antelación y trazar sus estrategias empresariales".
Por último, cabe destacar que afrontar la regulación exige conocimiento, destrezas y herramientas adecuadas para garantizar el funcionamiento eficaz de dicho mercado. La máxima preocupación este año es anticiparse a la aparición de nuevos riesgos que puedan afectar al sistema financiero y cómo resolverlos, especialmente los riesgos y la de ciberseguridad. La respuesta regulatoria, dada la complejidad de las fintech, pasa por lograr una mayor cooperación y una más completa coordinación tanto en el ámbito nacional como en el internacional.