La pandemia ha paliado el tejido empresarial español, las estadísticas hablan por sí solas, según El Departamento de Economía de CEOE las empresas españolas perdieron 287.000 millones de ingresos en 2020 por el impacto del COVID-19.
Pese a ello, Carlos Delgado, CEO de LEVEL UP Negocios, quiere lanzar un mensaje de esperanza: “hay empresas que se han reinventado e incluso han multiplicado su crecimiento comparado con antes de la pandemia”.
Eso mismo le ocurrió a Francisca, dueña de Darome que tras el inicio de la pandemia vio como su negocio de aromas peligraba. Se vio obligada a cerrar una de sus tiendas físicas y centró todos sus esfuerzos en crear comunidad en internet, “creamos un movimiento, aportamos lo que sabemos, nuestra alegría y conectamos de una forma mucho más profunda con nuestro cliente. En 2020 nuestras ventas pasaron de 200.000€ a 800.000€”, concluye esta emprendedora.
Siguió su ejemplo Mari Carmen Fenoll, CEO de una agencia de viajes que facturaba cerca de 800.000€ antes de la crisis. “El 14 de marzo mi negocio se quedó a 0, pero mi cabeza comenzó a trabajar. Invertí en mi formación y creamos nuevos proyectos para diversificar ingresos. Hemos lanzado un ecommerce de comida gourmet y tenemos en fase BETA una agencia de marketing digital con los que hemos mantenido la facturación”.
También tenemos la historia de Antonio Bernabéu, CEO y Gerente de Menta, que llegado el momento tuvo que cerrar 4 de sus 5 tiendas físicas y adaptar toda su empresa de venta de ropa para mujer al comercio electrónico. “Apostamos por las Redes Sociales. Comenzamos a hacer un directo diario a las 15:30 de la tarde pensando en nuestra clienta ideal. Comenzaron a seguirlo unas 100 personas y ahora es seguido por 1000-1500 personas diariamente y hemos pasado de 20 pedidos al día a más de 150”
Todos estos testimonios tienen algo en común, la acción, la formación y la transformación total de sus negocios.