La Asociación aplaude la aprobación hoy, por parte del Parlamento Europeo, de la nueva directiva que protege en mayor medida al consumidor al regular expresamente el resarcimiento a los afectados.

El establecimiento de un marco eficaz para la acción colectiva constituye un hito largamente reivindicado por ADICAE.

Una adecuada acción colectiva como la que persigue la directiva no solo evitará la saturación de la Justicia como está sucediendo en los abusos hipotecarios, sino que permitirá reequilibrar la posición de los consumidores en el mercado, ofreciendo una herramienta de fácil corrección de malas prácticas, abusos y conflictos de carácter generalizado y masivo en ámbitos clave como el bancario, las telecomunicaciones, la energía o el transporte.

Para ADICAE se trata de un avance clave e imprescindible para afrontar los retos presentes y futuros de los consumidores.

ADICAE, organización de consumidores que ha destacado por apostar de forma sistemática por la acción colectiva como única vía de solución a conflictos y fraudes masivos, instará al Gobierno y al Parlamento españoles a una rápida y eficaz transposición que permita superar las actuales barreras existentes en España.

A los 20 días de la publicación de la Directiva en el DOUE la norma estará en vigor, y si bien el plazo para transponerla al ordenamiento español se extiende hasta los 24 meses, ADICAE destaca la urgencia de su traducción inmediata a la legislación española ante los enormes abusos masivos aún sin resolución en España y ante los que cientos de miles de consumidores siguen sin solución efectiva.

ADICAE, asociación defensora en solitario de las acciones colectivas, continúa con paso firme en su lucha contra los fraudes masivos y sistemáticos que sufren los consumidores, los cuales solo pueden ser resueltos eficazmente a través de una actuación judicial colectiva.

Esta histórica reivindicación de la acción colectiva se ha plasmado, por parte de ADICAE, en múltiples estudios (ESTUDIO 1 y ESTUDIO 2) sobre los fundamentos de los conflictos masivos, y se hace visible en las innumerables acciones colectivas iniciadas por la asociación: academias de inglés (2002), macrodemanda por cláusulas suelo (2010), participaciones preferentes, swaps de Caixa Galicia y otras, productos estructurados vinculados a Lehman Brothers comercializados por la banca en España, Vodafone, gastos hipotecarios (107 demandas colectivas), o tarjetas revolving (demanda frente a Wizink).

Para la Asociación la acción colectiva ante abusos generalizados no solo permite ahorrar tiempo y costes a los afectados y a la propia justicia española, evidentemente saturada, sino sobre todo visualizar ante toda la sociedad la dimensión que adquieren los fraudes de las empresas y entidades financieras, así como la fuerza que pueden tener los consumidores agrupados y organizados bajo una causa legítima y común.