EL Partido Popular de Totana asegura que la Sra. Concejal de Hacienda no tiene ninguna credibilidad política para hacer manifestaciones sobre la gestión municipal después del “show” que montó hace semanas con su dimisión tras su enfrentamiento con el Sr. Alcalde y luego retractarse de su decisión.

La Sra. Concejal de Hacienda ha demostrado no tener ni personalidad ni valía política para este cargo anunciando primero su marcha con una pataleta infantil y luego quedarse en el Gobierno municipal del pacto saliendo en una patética rueda de prensa pidiéndose disculpas ella y el Sr. Alcalde y haciendo las paces.

Parece evidente que la famosa rueda de prensa del Sr. Alcalde poniendo a los pies de los caballos la gestión de su Concejal de Hacienda era la realidad que el PP venía diciendo y nadie quería ver, y que todavía hoy nada ha cambiado porque sigue sin tener peso en la gestión diaria ni en los hechos.

La Concejalía de Hacienda “funciona” por los técnicos municipales con una trayectoria que les avala, pero no por la capacidad y competencia de la Sra. Ana Cánovas.

La Sra. Concejal y el PSOE hablan como si los gobiernos del PP no hubieran encontrado facturas sin pagar en los cajones. Todavía hoy hay facturas atrasadas sin reconocer de gobiernos socialistas que están sin pagar.

Que la Sra. Concejal de Hacienda, que es la más nefasta que en esta área ha tenido Totana, salga ahora a hablar de facturas impagadas de la época del PP es algo así como el “Cuento de la lechera”, sobre todo cuando todavía no ha dado cuenta a la ciudadanía de la auditoria que el PP pidió que se realizase por activa y por pasiva y de la deuda real municipal y no cifras inventadas que se utilizan. Después de un año de Gobierno ya han tenido tiempo para muchas cosas y una de ellas es explicar las cuentas claras a los vecinos, además teniendo en cuenta que se contrató a una empresa por un importe de 6.400 euros al mes como asistente del área de hacienda y de la Concejal del ramo.

La Sra. Concejal y su Grupo Municipal del PSOE  hicieron del tema de la deuda uno de los más debatidos en la campaña electoral, aunque hoy no sorprende a nadie cuando en verdad este Equipo de Gobierno no está cumpliendo ninguna de las promesas que hicieron a los totaneros en campaña sino lo contrario.

Debería explicar la Sra. Ana Cánovas dónde está la fantástica varita mágica con la que pensaban solucionar todos los problemas económicos del Ayuntamiento y que anunciaron a los vecinos. El PP ya hizo numerosos esfuerzos en la contención económica y financiera en la anterior legislatura, y debería informarse antes de criticar con tanto descaro.

El Gobierno del PP afrontó la situación en una época de crisis y escasísimos ingresos con la ayuda de los funcionarios y las asociaciones de este pueblo que entendieron como nadie la situación que arrastra este Ayuntamiento y que hay que recordar también es consecuencia de la gestión hecha por los grupos de izquierdas cuando gobernaron anteriormente, que parece que se nos olvida que ellos también gobernaron cuatro años y fueron quien inventaron la deuda en este Consistorio.

La Sra. Concejal de Hacienda se empeña en culpar de todos los males económicos al PP cuando ella debería explicar el por qué todavía no ha presentado un Plan de Ajuste al Ministerio después de más de un año de gestión y que va a llevar al Ayuntamiento a tener que devolver más de 6.000.000 € mientras que continúan pleno tras pleno montando circos y espectáculos de falta de consenso entre ella y el Sr. Alcalde, y nos hemos convertido en el hazmerreír del Ministerio de Hacienda.

Sus palabras no tienen credibilidad a estas alturas después de que su ineficacia va a llevar al Ayuntamiento de Totana a devolver los seis millones de euros que solicitaron al Ministerio de Hacienda, además de su falta de transparencia que se evidencia pleno tras pleno, como fue el caso del último pleno en el que no se facilitó la documentación de las facturas por el cual se inicia un expediente extrajudicial, dejando en entredicho la defensa de esa falta de transparencia al su compañero y Alcalde.