"Tras la celebración del último Pleno del Ayuntamiento de Totana, quiero manifestar que fue un nuevo ejemplo de consumación de la felonía del PP .

En ese Pleno ha quedado de manifiesto el "modus operandi" de este equipo de gobierno municipal ,  en el que sólo importa lapidar y coartar el derecho a la libertad de expresión y opinión, así como el derecho a cumplir fielmente desde mi cargo como concejal la Oposición política. 

Los ciudadanos saben que he cumplido mi función con respeto, desde la denuncia sistemática de todo aquello que he considerado que va contra los intereses de los vecinos de Totana. 

Ha quedado evidenciado que a mí no me eligieron para ser un número en los plenos , sino para manifestar libremente mi opinión y criticar todo aquello que pueda atentar contra la legalidad . Estoy convencida de que esta perversión de la vida pública abunda en este gobierno municipal. 

Dejo claro que ante el atropello que supone una reprobación pública, no hay nada que avale tal reprobación. Ni en el fondo ni en la forma, pues se esconden tras una moción de apoyo a trabajadores para condenar y censurar mi conducta. 

Hago constar que tal reprobación venía precedida de reuniones de la alcaldesa con trabajadores de CEDETO, en las que, desvirtuando la realidad de mis denuncias y usando la demagogia , trataba de poner contra mí a este colectivo, cosa que parece no consiguió porque bien es sabido el respeto que los trabajadores me merecen y mi insistencia en que ellos no fueran las víctimas finales de una mala gestión. 

Ante el temor que esta u otras actuaciones pudieran tener ante mi persona, en horas previas al Pleno registré en este ayuntamiento escrito de petición de copia del mismo y me personé ante el cuartel de la Guardia Civil de Totana para denunciar el intento de coartar mi libertad política y mi actuación como concejal. 

Son varias las actuaciones de Alcaldía en las que se me ha despojado del respeto mínimo como representante electo y se ha vulnerado la ley. A pesar de que en sucesivos plenos he rogado respuestas y he solicitado información, el equipo de Gobierno se ha reído y, obviando mis derechos, no ha facilitado mi labor ninguneando mis actuaciones.

Es, ante este gesto de tocar fondo en el respeto a mi actividad, cuando me he planteado que la única salida es acudir a los órganos judiciales competentes para que depuren tales conductas.

Agradezco a mi partido y a IU , su oposición a la moción de reprobación, acto de pura coherencia en el que no se plegaron a hacer  el juego al PP.

Estoy convencida que la judicialización  de la vida política será la tónica de lo que queda de legislatura, ya que, por parte de esta concejala, y como anuncié en turno de ruegos y preguntas del Pleno, existe la convicción de que la única oposición a este gobierno municipal que usa y abusa del rodillo de la mayoría, es la vía judicial.

Tras mi paciencia y mi reflexión considero lo más coherente acudir y personarme ante la Fiscalía Anticorrupción en las Diligencias abiertas y ante el juzgado de instrucción 2 de Totana, diligencias que se mantienen abiertas contra la alcaldesa, secretaria e interventor entre otros. 

Con tal decisión no contravengo la postura de mi partido, que como consta en actas de Pleno, ha dejado muy claro su frontal oposición al uso del dinero de los convenios  y otras tantas y variadas irregularidades, incluso se dejó constancia  de  la intención de denunciar judicialmente. Para ello me remito al Pleno de enero del 2007 entre otros, pues en base a ello y a la actualidad municipal, me voy a personar e informar a la fiscalía de todos los actos que allí figuren denunciados y sobre los que yo pueda dar luz y documentación sobre ellos, esperando que sea la actuación judicial la que enderece este rumbo, como ya hizo en mi apoyo a las trabajadoras de las escuelas infantiles. 

Reitero que otros discursos son estériles y se ha comprobado que es una pérdida de tiempo y de legislatura, donde Totana se ha endeudado a límites insoportables y tenemos un Ayuntamiento hipotecado para muchos años, lo que significará inacción total por carencia de medios en la actuación municipal.

Fue la alcaldesa la que en junio de 2012 amenazó con llevarme al juzgado. Ahora soy yo quién he dado el paso en un intento de clarificar muchas cosas, entre otras mi conducta en el ámbito municipal, pese a las calumnias vilmente vertidas. 

Queda poco para el fin de esta legislatura, pero mi paso por la política municipal no me ha hipotecado en nada por lo que conservo mi libertad y la mantendré hasta el final de legislatura.

Me pongo siempre al servicio de los vecinos y ciudadanos de Totana que, a veces amedrentados o condicionados, no encuentran voz que trasmita sus demandas y denuncias como siempre he hecho".