La alcaldesa de Totana, Isabel María Sánchez, y el representante de la nueva empresa adjudicataria, Agustín Abellaneda, han suscrito el nuevo contrato de gestión y explotación del servicio público de la piscina cubierta de Totana, que tiene una duración de 15 años y otros cinco prorrogables, y que entrará de forma oficial en funcionamiento el próximo mes de septiembre.
La Junta Local de Gobierno adjudicó la pasada semana a la mercantil "ANG VIP Sport Salud y Ocio, SL (MOVE)" el servicio público de la piscina cubierta después de que la anterior empresa adjudicataria rescindiera en abril, de mutuo acuerdo, el contrato de prestación del mismo.
El acuerdo establece que la nueva concesionaria compromete una inversión inicial, antes de 15 meses, de 420.532 euros, para la ejecución de obras de acondicionamiento de esta infraestructura, algunas de las cuales se acometerán durante el próximo mes de agosto.
Además, se fija un canon neto anual de 18.000 euros y el adelanto de canon equivalente a cinco años por un importe de 90.000 euros más IVA. De igual modo, en una segunda fase, se recoge una inversión de 422.325 euros aunque condicionada a varios parámetros, como la demanda comercial y a la permuta del importe correspondiente a su realización por el canon a abonar al Consistorio.
Durante las próximas semanas de agosto, y entretanto se acometen obras de mejora en esta infraestructura, los usuarios pueden continuar haciendo uso de los servicios en las piscinas públicas del polideportivo municipal "6 de Diciembre" y en el gimnasio "Mi-San".
Las obras que se van a acometer se refieren a la ampliación del gimnasio existente, la habilitación de una nueva sala de fitness y cycling, entre otras dependencias.
La empresa "Duet Sports", anterior adjudicataria, asumió el servicio en mayo de 2009 tras invertir 1,3 millones de euros en dicha infraestructura, en la que se construyó un spa, saunas, nuevas salas polivalentes, nuevo gimnasio, oficinas, dos pistas de pádel, reforma en las gradas y equipamiento de la instalación, entre otras.
Tras la adjudicación del servicio, el Ayuntamiento dejó de perder, con la externalización de éste, una media de 372.000 euros al año en los nueve meses que abría la instalación, lo que suponía un ahorro de casi 1,2 millones de euros en los últimos tres años en las arcas municipales.