Sociedad

El juego con muñecas estimula a los niños a hablar sobre los pensamientos y las emociones de los demás

Según los últimos descubrimientos de la neurociencia

El segundo año del estudio, desarrollado por neurocientíficos de la Universidad de Cardiff bajo encargo de Barbie®, se sustenta en una investigación de varios años que analiza el impacto del juego con muñecas en los niños

Tras el primer año de investigación, el estudio concluyó que el juego con muñecas activa partes del cerebro que permiten a los niños desarrollar la empatía y las habilidades de procesamiento social

Barbie y un equipo de neurocientíficos de la Universidad de Cardiff han revelado los últimos resultados de la investigación de varios años que explora el impacto del juego con muñecas en el desarrollo de los niños a corto y largo plazo. En el segundo año, los investigadores analizaron la importancia de lo que los niños hablan durante el juego, y descubrieron que cuando juegan a solas con muñecas, hacen un mayor uso del lenguaje para referirse a los pensamientos y las emociones de los demás.

Las últimas investigaciones han demostrado que los niños hablan más sobre los pensamientos y las emociones de los demás, un concepto conocido como lenguaje del estado interno (ISL), cuando juegan con muñecas que cuando juegan con una tableta. Hablar sobre los estados internos de los demás permite a los niños practicar habilidades sociales que pueden utilizar cuando interactúan con personas en el mundo real y puede ser potencialmente beneficioso para el desarrollo emocional de los niños.

"Cuando los niños crean mundos imaginarios y juegan con muñecas, primero se expresan en voz alta y luego interiorizan los mensajes en torno a los pensamientos, las emociones y los sentimientos de los otros", afirma la doctora Sarah Gerson, investigadora. "Esto puede tener efectos positivos a largo plazo en los niños, como son el estímulo de niveles más altos en el procesamiento social y emocional y el desarrollo de habilidades sociales como la empatía, que pueden interiorizarse para construir y formar hábitos de por vida".

Al observar a los niños*, los investigadores notaron un aumento de la actividad cerebral en la región del surco temporal posterior superior (pSTS) cuando hablaban como si sus muñecos tuvieran pensamientos y sentimientos. Esta región está muy implicada en el desarrollo de las capacidades de procesamiento social y emocional, lo que corrobora los resultados del primer año, según los cuales, incluso cuando los niños juegan a solas con muñecas, pueden ayudar a desarrollar habilidades sociales vitales como la empatía.

Para explorar la activación del cerebro mientras los niños jugaban con muñecas y con tabletas, tanto solos como con otra persona, se utilizó un equipo de espectroscopia funcional de infrarrojo cercano de última generación. Los investigadores descubrieron que jugar con muñecas provoca más ISL sobre los demás que jugar con tabletas, y que el uso de ISL sobre los demás está relacionado con una mayor activación del PSTS. 

"El lenguaje interno puede indicar que un niño está pensando en los pensamientos y las emociones de otras personas mientras juega con los muñecos", afirma la Dra. Gerson. "Estas habilidades son realmente importantes para interactuar y aprender de otras personas y para navegar por diversas situaciones sociales. Es fundamental para entablar y mantener amistades, así como para aprender de sus profesores y padres".

La empatía y las habilidades de procesamiento social parecen ser muy valoradas por los padres y resultan esenciales a medida que los niños siguen creciendo emocional, académica y socialmente. En 2020, Barbie realizó una encuesta mundial** que sugería que el 91% de los padres calificaba la empatía como una habilidad social clave que desearían para sus hijos, pero sólo el 26% era consciente de que el juego con muñecas podía ayudar a sus hijos a desarrollar estas habilidades cruciales. Los padres y cuidadores también se han mostrado cada vez más preocupados por el desarrollo de sus hijos durante los dos últimos años. De hecho, el 61% de los padres informó de que el desarrollo socioemocional de sus hijos se había visto afectado negativamente por la pandemia***.

Aunque la estimulación cognitiva y social fuera de casa se ha visto limitada por la pandemia, la investigación de la Universidad de Cardiff sugiere que el juego con muñecas puede ofrecer a los niños la oportunidad de emular escenas e interacciones de su vida cotidiana. Los niños imitan lo que observan escuchan de sus padres, profesores o compañeros, y las muñecas pueden darles una salida para recrear lo que han observado y escuchado y así poder entrenar sus habilidades en situaciones sociales de la vida real.

La investigación, además sugiere que estos resultados son independientes al género, lo que revela la gran importancia del juego con muñecas para practicar las habilidades sociales tanto de niñas como de niños.

"Estamos orgullosos de que al jugar con Barbie y vocalizar sus pensamientos y emociones, los niños puedan estar construyendo habilidades sociales cruciales, como la empatía, que les darán las herramientas necesarias para convertirse en adultos inclusivos y seguros de sí mismos" declaró Lisa McKnight, Senior Vice President and Global Head of Barbie and Dolls, Mattel. "Como líderes en la categoría de muñecas, esperamos descubrir aún más beneficios del juego con muñecas, basados en la neurociencia, a través de nuestra asociación a largo plazo con la Universidad de Cardiff."

Los resultados de este segundo año de investigación, titulado Doll play prompts social thinking and social talking: Representations of internal state language in the brain, fueron publicados en Developmental Science en 2021 por la Dra. Sarah Gerson y sus colaboradores del Centro de Ciencias del Desarrollo Humano de la Universidad de Cardiff (Reino Unido), así como por sus colaboradores del Kings College de Londres. 

En otoño de 2020, la Universidad de Cardiff y Barbie dieron a conocer los resultados del primer año del estudio, Exploring the Benefits of Doll Play through Neuroscience, publicado en Frontiers in Human Neuroscience.

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