Sociedad

Yumala Trasobares, de peón a diva de la noche

Pepe es un chico joven de Elche que conoció el ambiente gay y comenzó a hacer drag en Murcia. A pesar de llevar poco tiempo en este arte, muestra mucha seguridad actuando; cuando se pone los tacones pisa con fuerza el escenario

José Manuel García, Pepe para sus conocidos, es un chico ilicitano de 20 años que lleva relativamente poco tiempo viviendo en la Región de Murcia. Se mudó a la capital murciana en septiembre de 2021 y desde noviembre de ese mismo año da vida a Yumala Trasobares en el mítico local de ambiente 'Piscis Meeting Ponit'. Es un apasionado del formato 'Drag Race', el conocido talent shows presentado en Estados Unidos por RuPaul y en España por Supremme De Luxe.

El bar de ocio nocturno es el escenario drag por excelencia de la comunidad autónoma. Cada semana se llena de gente que llega hasta ahí para disfrutar de la disciplina artística del transformismo.

En este especial del Orgullo LGTBI de 'Murcia.com' hemos entrevistado a Yumala para conocer un poco mejor los comienzos de alguien que apuesta por el transformismo. Compagina su faceta drag con la formación como actor y las artes plásticas, se dedica a la pintura. En sus shows da visibilidad a los problemas de salud mental. Yumala ofrece sobre el escenario performances desenfadadas, sensuales y arriesgadas.

Periodista. Llevas muy poco tiempo en el mundo drag. Decidiste comenzar en la región, ¿cómo fue?

Yumala Trasobares. Me mudé a la ciudad de Murcia para cambiar de aires. Yo soy un chico que siempre ha vivido en una zona de campo de Elche. Fue un cambio grande empezar a vivir en la ciudad. Llegué para estudiar interpretación, mi objetivo es entrar a la escuela de arte dramático de Murcia; me gusta lo artístico, tanto escénico como plástico.

Cuando llegué a la capital, la segunda semana fui a 'Piscis' y pude conocer el ambiente gay por primera vez. Yo era un apasionado del mundo drag y vi a Lolita Versache actuar y cuando acabó le dije que ella iba a ser mi madre drag, y me dijo que cuando quisiera. En noviembre me enteré de que estaban buscando a gente nueva para actuar y pensé que era mi oportunidad, y enseguida fue mi debut.

P. Antes de seguir… ¿Con qué término te identificas: drag, travesti o transformista?

Y. T. Me es indiferente el término. Soy drag, travesti y transformista. Hay mucha diversidad en esta disciplina artística, pero cada artista tiene su mentalidad y es muy respetable el término que escoja cada una. Con drag me siento cómoda, pero siempre que se diga desde el respeto me siento bien con cualquiera de los términos.

P. ¿A qué te dedicabas en Elche?

Y. T. Yo trabajaba en la obra, era peón, albañil. La obra cansa mucho físicamente y el drag he comprobado que puede producir cansancio mental; siempre estás pensando en qué dirá el público cuando te vea actuar. La gente se fija en todo: maquillaje, peluca, tacones, etc. Es un cambio importante. Además, vivimos en una sociedad en la que parece que todo el mundo sabe de todo, y no es así, aunque, de momento, solamente he tenido críticas constructivas y eso me ayuda. Ahora soy como un bebé, llevo poco tiempo y soy como una esponja, absorbo todo lo que me llega.

P. Te he visto actuar. Tus shows son llamativos y arriesgados, pareces una persona con mucha seguridad sobre el escenario.

Y. T. Soy una persona segura y activa, soy un 'culo inquieto'. Antes de actuar suelen haber nervios, pero una vez que pongo el tacón sobre el escenario, se te pasan. Mi alter ego me da poderío. Ofrezco erotismo y soy muy gamberra como Yumala, y se me da bien bailar. Pepe, en su día a día, es un chico más prudente y formal (risas). En mis shows también hago speech sobre salud mental, me gusta hablar de la depresión y la ansiedad desde un punto de vista cómico, pero el objetivo es dar visibilidad a estos problemas; me importa la estabilidad emocional.

P. Cuando una persona se decide a hacer drag, ¿suele haber una 'salida del armario'?

Y. T. A mí no me ha hecho falta. Estas situaciones hay que hablarlas con naturalidad. ¡Qué importa que trabajes como drag que como otra cosa! Es un trabajo como todos, aunque en este estás más expuesto ya que es una expresión artística.

P. ¿Por qué escogiste Yumala Trasobares como nombre artístico?

Y. T. Yumala viene de una broma que tenía con mis compañeras de piso. Y Trasobares viene de la gran Manuela Trasobares, que es una transexual que se hizo muy popular en la década de los 90; es pintora y una mujer muy exuberante, y a mí todo ese mundo plástico y artístico que ella tiene me encanta. Llevo esa esencia en mi nombre artístico.

P. ¿Qué consejo le das a la gente que quiera emprender carrera drag?

Y. T. Hay que tener claro si esta es tu pasión. Si este mundo drag te hace ilusión y piensas que te puede hacer feliz, adelante, no reprimas el sentimiento. Hoy hay muchas oportunidades para dar el salto, existen multitud de plataformas digitales para darse a conocer. Yo he empezado en un local, pero hay show que se hacen de forma digital.

También hay que pedir ayuda a las drags. En este mundo hay mucha gente buena. Yo no tengo maldad y me he dado alguna hostia por eso mismo, pero hay gente maravillosa en el camino, como mis compañeras Penny Rabbit y Lolita Versache.

P. Por último… ¿Hay que llevar los shows drags más allá del ambiente gay?

Y. T. Esto lo veo genial, es darle visibilidad, así no nos quedamos encajadas en un determinado local de ambiente. Me gusta el público homosexual, pero llevar esto a una fiesta de pueblo, por ejemplo, hace que tengamos un público más variado y que podamos llegar a más edades. Cuando algo se conoce, se respeta más.

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