Desde Vox estamos en contra de la conexión de las depuradoras de Torre Pacheco y Los Alcázares, con San Javier y la intención de desviar caudales de aguas supuestamente depuradas, con el emisario de San Pedro del Pinatar.
No entendemos cómo se puede seguir produciendo tal derroche de recursos necesarios. Los motivos que la CHS y el Ministerio de Transición Ecológica han alegado para justificar la ejecución de dicha obra, nos parece un despropósito, ya que se alega mala calidad de las aguas depuradas o falta de interés por parte de los regantes para reutilizar esos caudales nada desdeñables.
La realidad es que la capacidad de las EDAR,s es inferior a las recomendaciones de los ingenieros y fundaciones que trabajan sobre el terreno y con los agricultores, pues en período estival, con el incremento de la población, se sobrepasa su capacidad, vertiendo aguas mal depuradas e inservibles para su uso, también en episodios de lluvias copiosas se producen problemas de desbordamientos, vertiéndose hasta 12 Hm3 por las ramblas que desembocan en el Mar Menor. A este respecto, Antonio Martínez Aniorte, candidato de VOX a la alcaldía de San Pedro del Pinatar comenta: “parte de la solución debe partir de las corporaciones municipales, mejorando el sistema de alcantarillado propio de sus zonas urbanas, para que no viertan sus aguas en la costa, sino en las EDAR,s.
Entendemos que esas aguas mal depuradas o de mala calidad se están vertiendo al Mar Menor en la actualidad y se pretende desviarlas al Mediterráneo, a través del emisario de San Pedro del Pinatar, pero que, con ocasión de las mareas, el resultado será la contaminación de la costa, trasladando el problema de lugar y no dando una solución eficaz”.
Más les valdría dedicar esa ingente inversión a la adecuación de las redes de alcantarillado de los municipios y a la ampliación y mejora de las EDAR,s, para permitir la reutilización íntegra de esas aguas, en la necesitada agricultura de la comarca del Campo de Cartagena.
Se está poniendo en peligro la sostenibilidad ambiental de la franja costera, el turismo de varias poblaciones, las empresas y los empleos del campo y de aquellos que viven de la costa, como hosteleros y pescadores, y no se está poniendo a disposición de nuestros regantes un agua tan necesaria. Se ha demostrado con varios estudios independientes y también oficiales, que el problema de contaminación no es de los nitratos de la agricultura, sino de los fosfatos procedentes de los residuos urbanos, pero todo vale con tal de justificar su Agenda 2030 y su religión climática.
Tampoco pasa la solución por las lagunas artificiales que pretenden una depuración verde, ecológica y sostenible, pues sería crear otro problema, como el de los olores de las aguas en descomposición y proliferación de insectos, que se lo pregunten a zonas de Huelva, donde por realizar obras de este tipo, ahora están fumigando desde avionetas con productos químicos contra los insectos, que apenas afectan al ser humano, pero sí a la fauna y flora marina. Antonio Martínez Aniorte se opone a la pretendida creación de una de estas lagunas en la zona del Mojón de San Pedro del Pinatar: “los vecinos del Mojón y de todo San Pedro pueden confiar en que si gobernamos en el Ayuntamiento, nos opondremos firmemente a la consecución de este proyecto tan perjudicial para nuestros vecinos, en su lugar, apostamos por la coordinación y cooperación entre municipios, para encauzar las ramblas que desembocan en el Mar Menor y Mar Mediterráneo, hacia estaciones depuradoras existentes, y si es necesario, su ampliación o construcción nueva y el aprovechamiento de esas aguas tan necesitadas en nuestro campo”. El acuífero del Campo de Cartagena cuenta con unos 110 Hm3 de agua subterránea sin extraer, cuando el consumo anual de la zona ronda los 60 Hm3.
Entre unas y otras medidas, unidas al trasvase del Tajo-Segura, se podría garantizar el suministro permanente, suficiente y de calidad, de agua para la agricultura y el consumo, permitiendo la supervivencia de la huerta de Europa, sus empresas y el turismo, pero parece que el “negocio” y los “intereses” están por encima de las “necesidades”