El varadero Amjomar ha supuesto una inversión de más de dos millones de euros por parte de la empresa concesionaria y permite la elevación de embarcaciones de gran tonelaje.

El consejero de Fomento, Obras Públicas y Ordenación del Territorio, Francisco Bernabé, acompañado por la alcaldesa de San Pedro del Pinatar, Visitación Martínez, visitó hoy las obras realizadas en el puerto de la localidad para la construcción de un nuevo varadero, cuya ejecución y posterior explotación tiene concedida la empresa Amjomar por un plazo de 27 años y con un canon anual de 45.000 euros.

Bernabé señaló que el nuevo varadero, que se encuentra en la dársena interior del puerto, entre el Club Náutico Villa de San Pedro y la Dársena Deportiva Marina de las Salinas, junto al Puerto Pesquero, "viene a enriquecer unas instalaciones portuarias con más de 600 puntos de atraque, zona comercial y de ocio y con un privilegiado enclave, lo que constituye, sin duda, un gran atractivo para los aficionados a la náutica".

Por su parte, la alcaldesa ha alabado la valentía de los empresarios pinatarenses por apostar por su municipio con iniciativas innovadoras como ésta que amplía los servicios náuticos de la localidad, situándola como referente en la Región y que además ha supuesto la creación de 12 puestos de trabajo.

La concesión se documentó en marzo del pasado año, y las obras dieron comienzo en julio con un presupuesto de 2,1 millones de euros, sobre una superficie de unos 4.000 metros cuadrados, habiendo generado 13 puestos de trabajo.

Los usos son los directamente relacionados y derivados de las operaciones y funciones de varada, apuntalamiento, mantenimiento, reparación, revisión, pintura, botadura, exposición de suministros navales, aspiración de sentinas/aguas sanitarias, punto limpio, así como los usos derivados de las necesidades complementarias de un varadero.

Para el acceso de las embarcaciones desde mar al varadero se ha construido un foso en el que se ha instalado un travelift de 160 toneladas para la elevación de las embarcaciones y puesta en tierra.

Posteriormente, se trasladan hasta el punto de limpieza y lavado, situado delante del foso, desde donde, una vez limpias, una plataforma las lleva al taller de reparaciones o las deposita en un puesto de varada.

Se ha dotado al varadero de las instalaciones correspondientes a la red de suministros de alumbrado, de agua, energía eléctrica y aire comprimido, protección contra incendios, drenaje y recogida de residuos en área reservada como punto limpio, así como saneamiento de aguas residuales.

También cuenta el varadero con una nave prefabricada con estructura de hormigón armado, con una superficie en planta de 521 metros cuadrados y dos zonas diferenciadas para taller y oficinas. A la vez, se distingue entre los espacios destinados a la atención de los clientes, con recepción y exposición de artículos de venta, y a taller, un espacio diáfano para albergar a las embarcaciones y realizar los trabajos de reparación de las mismas.