El consejero de Desarrollo Sostenible y Ordenación del Territorio, Benito Mercader, asistió esta mañana a la instalación en el Parque Regional de Las Salinas y Arenales de San Pedro de siete plataformas de nidificación para asegurar la supervivencia de especies amenazadas, en especial para la población de charrancito y charrán común.
Mercader destacó que “estas plataformas favorecen la reproducción del charrán común y el charrancito, dos especies que han visto como la gaviota patiamarilla ocupaba sus enclaves comunes de nidificación. El éxito de esta iniciativa está casi asegurado, ya que este tipo de islas flotantes ya ha sido empleadas con éxito en otros humedales como el Paraje Natural de El Hondo y el de Santa Pola, en la Comunidad Valenciana”.
Las islas flotantes cuentan con una superficie de madera que se cubre con arena de playa. Además, están enmarcadas por tablas a modo de cerco, cuya función es retener la arena y evitar la caída de los polluelos al agua. Asimismo, las plataformas cuentan con una rampa que facilita el acceso de las crías a la base. También tendrán dos zonas de sombra para proteger a las aves de la fuerte insolación. Las islas son fijadas con anclajes de gran peso, quedando lo suficientemente aseguradas y permitiendo cambiar su emplazamiento si fuera necesario.
Esta actuación, que cuenta con una inversión de 30.000 euros, forma parte del importante esfuerzo que está realizando la Consejería, a través de Fundación Cluster Mar Menor, encaminada a proteger la biodiversidad y revalorizar el Mar Menor. De hecho, hace unos meses se firmaron nueve convenios con las universidades de Murcia y Cartagena, Fecoam, el Instituto Euromediterráneo del Agua y otros colectivos para lograr la sostenibilidad y que analizan la incidencia de distintos factores en la laguna salada
El consejero Mercader destacó que “desde el Gobierno regional estamos impulsando las medidas que todos los murcianos tenemos que desarrollar para poner en valor la laguna salada, un humedal único en toda Europa y que cuenta con la máxima protección medioambiental”.
Charrán común y charrancito
El charrán común es un ave que, aunque no es vulnerable, está considerada como merecedora de una atención particular por su rareza y sus valores científicos, ecológicos y culturales por su singularidad. La población de esta especie que nidifica en la Región se localiza exclusivamente en el Parque Regional de las Salinas y Arenales de San Pedro del Pinatar. En 1995 nidificaron en el interior del Recinto Salinero 204 parejas, mientras que el año pasado lo hicieron 53 parejas, motivado sin duda por la ocupación de los lugares adecuados por la gaviota patiamarilla.
Asimismo, el charrancito es una especie catalogada como vulnerable y de interés especial. En el conjunto de los humedales protegidos del entorno del Mar Menor nidificaron el año pasado 170 parejas, de las que 157 (92,4 por ciento) lo hicieron en el Parque Regional de las Salinas y Arenales de San Pedro del Pinatar y 13 parejas (7,6 por ciento) en los humedales del Paisaje Protegido de los Espacios Abiertos e Islas del Mar Menor. Su evolución se ha visto mermada en la Región porque la gaviota también ocupa sus lugares de anidamiento.