León, 20 ene (EFE).- El teniente Roberto Carlos Álvarez, uno de los tres fallecidos hoy en el accidente aéreo de Albacete, era "un joven ejemplar" que tenía como sueño ser piloto de aviones y que era oriundo de la localidad leonesa de Carrizo de la Ribera, según ha explicado a Efe su alcalde, José Luis Martínez.

El menor de tres hermanos, Roberto Carlos Álvarez, de 23 años, era un buen estudiante y por vocación decidió ingresar en 2003 en el ejército, en la base aérea de San Javier, en Murcia.

Esta trayectoria se ha truncado hoy cuando, durante un entrenamiento rutinario, ha muerto junto a otros dos compañeros en Albacete, al chocar los dos aviones Mirage F-1 del Ala 14 del Ejército del Aire, en el que iban los tres militares.

"Todo el mundo que va a al Ejército es por vocación, pero estaba claro que a él ser piloto le gustaba especialmente; es una pena", ha dicho el alcalde de Carrizo, quien está a la espera de recibir confirmación de que el joven sea enterrado en esta localidad leonesa.

El alcalde ha explicado que poco antes de que se conociera la noticia había estado hablando con la madre de Carlos Álvarez y que tras tener conocimiento de la tragedia, la información se ha extendido con rapidez por todo el pueblo, que, según él alcalde, está consternado y aún no da crédito a lo ocurrido.

"Somos un pueblo pequeño, de poco más de mil habitantes, y estas cosas nos afectan a todos", ha dicho.

En 2003, fue admitido como alumno en el cuerpo general de la Academia General del Aire de San Javier en Santiago de la Ribera (Murcia), donde recibió la correspondiente formación.

Desde que fue a Murcia y después a Albacete, visitaba "siempre que podía" Carrizo de la Ribera, una población a unos 25 kilómetros de León donde residen sus padres, todos ellos "una familia ejemplar", según el alcalde.

Los otros dos fallecidos en el accidente aéreo han sido los capitanes Jerónimo José Carbonell Rodríguez y Fernando Negrete Usón.

Roberto Carlos era soltero y el menor de tres hermanos, las otras dos chicas.

El capitán Carbonell pilotaba uno de los aviones siniestrados y el capitán Negrete y el teniente Álvarez viajaban en el otro aparato, que era de doble mando, según el Ministerio de Defensa. EFE