La revista especializada en mujeres, estarguapas, con motivo del día mundial del cáncer de piel y la llegada del verano, ha querido conocer los hábitos de protección frente a la radiación solar de las mujeres en España.
Comienza el segundo verano en España con la pandemia de Covid-19 aún presente. Este año parece que se presenta con algunas ventajas respecto al anterior ya que la vacunación lleva un buen ritmo en todo el país y ha permitido relajar algunas medidas restrictivas dentro de la península. Esta situación continuada durante dos años, en la que numerosas personas continúan teletrabajando y se debe mantener el distanciamiento social en la medida de lo posible, han aumentado las ganas de salir de vacaciones a destinos en los que se pueda tomar el sol y estar al aire libre.
El problema procede cuando la emoción por poder tomar el sol este verano, hace que se nos olvide proteger correctamente la piel y tener en cuenta los problemas que a largo plazo puede provocar las largas exposiciones al sol. Los dermatólogos avisan todos los años con la llegada del verano la importancia de usar una buena crema con protección solar y evitar las horas en las que la exposición a los radiación solar es mayor. Los problemas que pueden aparecer si la piel no se protege frente a este agente externo pueden ser quemaduras, manchas, envejecimiento prematuro de la piel y la peor de todas: un melanoma.
Un melanoma es uno de los peores tipos de cáncer de piel, siendo una de las causas directas la exposición con una mala protección a los rayos UV. En España se detectan cada año casi 80.000 casos de cáncer de piel, de los cuales 4000 son melanomas. Aunque dentro de los cáncer de piel es de los menos comunes, si que se sitúa en los más agresivos por ello se insiste en una correcta protección como medida de prevención, y en caso de detectar una anomalía cutánea, un rápido diagnóstico puede ser vital para que no se desarrolle una metástasis.
Pero no solo en verano hay que protegerse del sol. En los últimos años se ha insistido en la importancia de usar protección solar en las partes de piel expuestas. En el invierno principalmente se protege la cara, ya que aunque la incidencia del sol puede pensarse que es menor que en verano, continúa mandando la misma radiación todo el año, afectando a la piel.
Muchas cremas, principalmente en los tratamientos para la mujer, ya comienzan a incluir un factor de protección para ayudar a proteger más fácilmente con un único producto en la rutina de cuidado personal. Pero si no incluyen este factor de protección se debería de aplicar otra crema extra que sí incluya la protección solar. Para conocer si las mujeres tienen en cuenta la protección solar en sus rutinas de belleza, hemos preguntado a las lectoras de estarguapas si incluyen este producto en sus compras:
2 de cada 10 mujeres aplican protección solar durante todo el año. La introducción del beneficio dentro de cremas de uso habitual para el rostro, ha incrementado que las mujeres se fijen si tiene este factor protector a la hora de la compra. Además dicen acudir al dermatólogo mínimo una vez al año. El resto de mujeres solo hace uso de la protección solar en verano.
6 de cada 10 mujeres solo aplica el protector solar una vez al día. La protección solar se debe aplicar como mínimo cada dos horas mientras se está expuesta al sol. Además de eso se tiene que tener en cuenta el factor de protección solar de cada crema y el tipo de piel de cada persona.
5 de cada 10 mujeres acuden a una farmacia para comprar protección solar. Los farmacéuticos pueden guiar en la compra del mejor producto para cada persona de manera individualizada, por ello muchas mujeres acuden a su consejo antes que comprarlo en una tienda de cosmética y cuidado.
Los especialistas este año además de insistir en protegernos adecuadamente, animan a acudir a una cita de control de la piel, ya que la pandemia ha demostrado que la piel es una de las áreas de salud que más ignoramos a nivel individual y el cáncer de piel es el que mejor se puede prevenir si se acude al médico con regularidad.