San Pedro del Pinatar, Moratalla, Murcia y Cartagena fueron los destinos preferidos, y los hoteles y las viviendas rurales las tipologías alojativas más elegidas
El programa del Bono Turístico de la Región de Murcia continúa demostrando su eficacia como herramienta de dinamización fuera de temporada alta, con 809 reservas desde su inicio el 8 de octubre y 1.779 pernoctaciones generadas en alojamientos turísticos.
Desde el comienzo de esta nueva fase, la iniciativa ha generado un impacto económico directo en los alojamientos de la Región de 289.595 euros, sin contar el gasto adicional en bares, restaurantes, comercio, transporte o actividades complementarias, como el turismo activo o cultural, y contribuyendo directamente a elevar la ocupación y mejorar los resultados de los establecimientos adheridos en un periodo habitualmente marcado por la menor demanda.
El presupuesto asignado a esta primera fase del programa, dotado con 150.000 euros, ha alcanzado ya un nivel de ejecución del 93,6 por ciento. Según la directora General de Competitividad y Calidad Turística, Eva Reverte, "este elevado grado de consumo confirma el atractivo del incentivo y su capacidad para estimular el gasto turístico, reforzar la actividad de las empresas y generar un impacto económico directo en los destinos de la Región".
En esta edición del programa participan actualmente 207 establecimientos regionales pertenecientes a 116 empresas turísticas. Esta amplia implicación empresarial permite ofrecer a los viajeros una diversidad de opciones en hoteles, apartamentos turísticos, casas rurales, cámpines, hospederías rurales y albergues, favoreciendo la distribución territorial del impacto económico y consolidando al Bono Turístico como un motor de dinamización para el sector.
El comportamiento del viajero indica una clara preferencia por las escapadas de fin de semana, que representan el 58 por ciento del total de reservas. Este patrón contribuye a distribuir la actividad turística de forma más equilibrada a lo largo del mes y de la semana, beneficiando tanto a los establecimientos alojativos como al conjunto del sector.
En cuanto a los destinos preferidos, San Pedro del Pinatar encabezó el ranking con el 21 por ciento de los bonos utilizados, seguido de Moratalla (18 por ciento) y las ciudades de Murcia (14 por ciento) y Cartagena (7 por ciento). Esta elección pone de relieve el atractivo del turismo rural y de sol y playa regional, así como el de su oferta cultural.
Respecto al tipo de alojamiento elegido, los hoteles fueron los más demandados (67 por ciento), seguidos de alojamientos rurales (22 por ciento) y apartamentos turísticos (5 por ciento), aunque estos últimos registraron la estancia media más prolongada junto a los cámpines, con 3,4 noches por bono, frente a los 2,9 días de hoteles.
El perfil del viajero fue mayoritariamente regional, un 43 por ciento de los bonos fueron adquiridos por residentes en la Región de Murcia, lo que refleja el potencial del programa para fomentar el turismo interno. Les siguieron turistas de Alicante (23 por ciento), Valencia (22 por ciento) y Madrid (2 por ciento).
Los motivos que impulsaron la solicitud del bono también arrojan datos significativos. Un 32 por ciento lo hizo atraído por la oferta cultural, un 25 por ciento por el interés de turismo rural y de naturaleza y un 8 por ciento por el atractivo de los productos de sol y playa y de salud. La gastronomía fue el factor determinante para un 8 por ciento de los participantes.
Reverte, añadió que el Bono Turístico "se confirma como un instrumento eficaz para reactivar el turismo en temporada baja, mejorar la ocupación, estimular el consumo local y apoyar al tejido empresarial regional. La segunda convocatoria se activará en enero y se extenderá hasta el 31 de mayo de 2026.
Desde que arrancó este programa en 2021 se han emitido más de 9.400 bonos, que han generado 21.000 pernoctaciones y un impacto total superior a los 2,5 millones de euros en facturación directa.