A finales de noviembre, tuvo lugar un acto institucional en el Patio de Armas del Cuartel de Artillería de Murcia, con motivo de la celebración del Día de la Delegación de Defensa en la Región de Murcia. Pero este año, además, el acto ha tenido un carácter especialmente significativo, pues esta Delegación ha celebrado su trigésimo aniversario.
Un aniversario que ha honrado a quienes han dado sentido a esta institución durante estas tres décadas cargadas de historia y, que al mismo tiempo, ha reafirmado su compromiso de seguir actuando como puente entre la ciudadanía y las Fuerzas Armadas (FAS). Sin duda, esta efeméride nos invita a mirar con gratitud al pasado, con agradecimiento al presente, y a enfrentar con esperanza los retos que aún están por venir.
1.- ¿Qué supone para una institución celebrar su 30º Aniversario?
Conmemorar un 30º aniversario implica reconocer el pasado, valorar el presente y proyectarse hacia el futuro. Es un ejercicio de memoria, gratitud, identidad y compromiso, que se convierte en un momento clave para renovar energías y fortalecer la misión institucional.
Aplicado este reconocimiento a la Delegación de Defensa en nuestra Región, vemos que es un hito que va más allá de la mera efeméride, pues supone la celebración de tres décadas de servicio constante a España desde la Región de Murcia.
Como todos los ciudadanos de la Región hemos podido constatar, estos treinta años han estado marcados por la lealtad, la dedicación y la firmeza en el cumplimiento de su misión constitucional, actuando como un vínculo esencial entre el Ministerio de Defensa y nuestra Comunidad Autónoma.
Alcanzar este hito supone la ocasión idónea para honrar y agradecer el esfuerzo diario de todo el personal -tanto militar como civil-, gracias al cual se ha forjado la solidez y credibilidad de esta institución en nuestra Región.
2.- Treinta años de historia construida por personas
Desde su creación en 1995, la Delegación de Defensa ha cumplido una misión que va mucho más allá de la gestión administrativa. Su propósito, tal y como destacó en su discurso el Delegado de Defensa, capitán de navío (CN) Gustavo A. Gutiérrez de Rubalcava Sánchez-Feragut, ha sido siempre claro: ser el puente humano y directo entre la ciudadanía y el Ministerio de Defensa. A lo largo de estas tres décadas, este compromiso se ha materializado gracias a todas las personas -militares y civiles- que han trabajado en sus sedes de Murcia, Cartagena, San Javier y Javalí.
La Delegación es un espacio donde la Defensa Nacional adquiere rostro, nombre y cercanía. Por ello, el Delegado recordó con emoción a todas las generaciones que han formado parte de la institución, agradeciendo un legado que hoy sigue inspirando al equipo actual.
3.- Gratidud por el correcto cumplimiento.
Durante el acto conmemorativo se destacó el ejemplo de quienes, con profesionalidad y vocación, sostienen cada día el funcionamiento de la Delegación. Las condecoraciones y reconocimientos otorgados no fueron meros símbolos, sino la expresión de un principio fundamental: la excelencia en el servicio público depende siempre de personas concretas.
A lo largo de 30 años, la Delegación ha consolidado una forma de trabajar basada en la cercanía, la discreción y la eficacia, demostrando que la Defensa también se construye en la atención cuidadosa al ciudadano y en la búsqueda constante de soluciones.
4.- La importancia de los Reservistas voluntarios.
En su discurso, el Delegado dedicó una especial atención a los reservistas voluntarios, pues constituyen un auténtico ejemplo del vínculo entre sociedad y FAS. Los 122 reservistas asignados a la Delegación de Murcia representan una forma noble y moderna de entender el servicio a España: ciudadanos que, desde sus profesiones y vidas ordinarias, deciden integrarse temporalmente en unidades militares para aportar su esfuerzo y su talento.
Los ascensos, despedidas por culminación del compromiso y nombramientos celebrados en el acto, fueron un recordatorio de una realidad que merece más visibilidad: la Defensa no es solo “cosa de militares”, sino que también es una responsabilidad compartida por ciudadanos que eligen participar activamente en ella.
5.- El vínculo histórico de la Región de Murcia con sus FAS.
Numerosos datos históricos muestran que la Región de Murcia mantiene una relación profunda y duradera con las FAS. Con cerca de 7.000 efectivos de los tres ejércitos desplegados en la Región -entre unidades operativas, centros de enseñanza y organismos de apoyo-, el territorio murciano ha sido, y sigue siendo, un punto estratégico y relevante para la institución militar.
En este año 2025, 519 murcianos se incorporaron como soldados y marineros, cifra que evidencia una confianza y una afinidad que se renuevan cada año. Esta realidad confirma algo que el Delegado quiso subrayar: Murcia y sus Fuerzas Armadas no solo conviven, sino que comparten un vínculo de afecto y respeto mutuo.
6.- Carta a un militar español.
Uno de los momentos más significativos del acto fue la entrega de premios del certamen escolar “Carta a un militar español”. Este certamen -que se celebra regularmente desde el año 2013-, es un ejemplo de la importancia que tiene el acercar el concepto de Defensa a las nuevas generaciones. La creatividad y madurez de los alumnos premiados reflejan que la Cultura de Defensa puede transmitirse desde el respeto, el interés y el diálogo.
Los jóvenes, como señaló el Delegado, son el futuro de España, y la Delegación tiene la responsabilidad pedagógica de acompañarlos en la comprensión de valores como el compromiso, la solidaridad, el esfuerzo colectivo y el servicio al bien común.
Para concluir…
La celebración de este Aniversario no fue solo un ejercicio de memoria, sino también un acto de proyección. El delegado animó a mirar hacia adelante, convencido de que “lo mejor está por venir”. Todo ello desde una convicción profunda: la defensa de un país no solo se sostiene con medios materiales, sino también con la confianza de su ciudadanía.
Este aniversario no representa un final, sino un nuevo inicio. Un recordatorio de que la misión sigue vigente: servir con cercanía, con excelencia y con la convicción de que España se defiende también desde el trato humano y el compromiso diario.