"Yo no quiero que Cartagena sea un enclave bélico en la Tercera Guerra Mundial a la que Donald Trump nos dirige, quiero que el puerto de Cartagena sea un lugar abierto al mundo, al comercio, a la actividad económica y al turismo", afirma la diputada María Marín
La diputada regional de Podemos María Marín ha llevado al Pleno de esta mañana los planes de la Armada de construir un 'superpuerto' en la Algameca para grandes barcos militares. "No podemos aislar esta noticia de la fiebre bélica en todo el mundo y del plan de Rearme de la Unión Europa", afirmaba la portavoz morada, que se reafirmaba: "Sí, digo rearme, aunque a Pedro Sánchez no le guste la palabra, porque esa es la realidad: rearme, armamento y guerra".
Marín se mostraba "preocupada" por la noticia, ya que la construcción de este 'superpuerto' "quiere decir que quieren convertir a Cartagena, por la puerta de atrás, en una base más de la OTAN en España, como Rota, como Torrejón o como Menorca". "Donald Trump nos ataca con sus aranceles, ataca al campo español y a la industria continuaba-. ¿Y cuál es la respuesta de España y de Europa?". Según ella, "invertir más en armas como pide Donald Trump, armas que se comprarán a la industria armamentística norteamericana", así como una "alineación cada vez mayor" con la política militar de Estados Unidos y la OTAN. "Por eso los halcones de la guerra han puesto su vista en Cartagena", declaraba.
A continuación, Marín lanzaba una serie de preguntas al consejero de Presidencia, Marcos Ortuño: "¿La construcción de un superpuerto de la OTAN en Cartagena es compatible con el desarrollo turístico de Cartagena?, ¿es compatible con el desarrollo del puerto de Cartagena como puerto estratégico para el comercio?, ¿es compatible con nuestra industria?, ¿qué impacto medioambiental va a tener?".
"Como cartagenera continuaba la portavoz morada-, a mí me parece que esta noticia supone muchos más riesgos que ventajas". "Yo no quiero que Cartagena sea un enclave bélico en la Tercera Guerra Mundial a la que Donald Trump nos dirige, quiero que el puerto de Cartagena sea un lugar abierto al mundo, al comercio, a la actividad económica y al turismo", apuntaba. Por último, le exigía al Gobierno regional "que vele por los intereses de la Región, también de Cartagena, e informe con la máxima transparencia de estos planes y de su impacto". "¡No a la guerra!", concluía.