Debido a lo escarpado del terreno los materiales han sido transportados por medios aéreos
La CHS tiene previsto ampliar la red SAICA con cinco nuevas estaciones
La Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) ha comenzado las actuaciones ampliación de la red del Sistema Automático de Información de Calidad de las Aguas (SAICA) con la creación de cinco nuevas estaciones medidoras. Una de las primeras en iniciar esas reformas ha sido el punto ubicado aguas abajo del embalse de Alfonso XIII en el río Quípar.
Las redes de control del SAICA están ubicadas estratégicamente en puntos considerados como críticos por estar situados en zonas susceptibles de recibir vertidos o por ser zonas protegidas, algunas de las cuales tienen captaciones destinadas a la producción de agua potable.
Por este motivo, su asentamiento radica en los lugares donde los datos son los más precisos para la finalidad de la red y para favorecer el trabajo de los técnicos de la CHS.
Así es como las actuaciones emprendidas en el punto SAICA del embalse de Alfonso XIII han requerido de ayuda de un helicóptero para el transporte de los materiales dedicados a realizar este proyecto de mejora de la estación medidora.
El traslado aéreo se hizo siguiendo tanto las recomendaciones medioambientales para no perjudicar a la flora y fauna del lugar, como las de salud y seguridad laboral de los operarios que intervinieron en estas labores.
La ubicación aguas abajo del embalse de Alfonso XIII es un punto de interés, de alto valor medioambiental y socioeconómico y que permite controlar la calidad y cantidad de las aportaciones que el Quípar hace al río Segura dentro de su curso medio, antes de llegar al cañón de Almadenes y el azud de Ojós.
En general, la red SAICA proporciona una valiosa ayuda e información sobre la situación de la calidad de las aguas continentales superficiales, entre sus cometidos están los de proporcionar información cualitativa de la contaminación detectada y su evolución en el tiempo, analizando las curvas de tendencia; complementa las redes de control periódico de la calidad de las aguas existentes; tiene efectos disuasorios frente a vertidos intencionados; monitoriza en tiempo real permitiendo actuaciones inmediatas de alerta a las captaciones existentes (estaciones de tratamiento de aguas potables, regadíos, etc), así como, facilita el control y seguimiento a corto plazo del vertido.
En las estaciones se analiza continuamente una serie de parámetros básicos representativos de la calidad de las aguas (temperatura, pH, conductividad, oxígeno disuelto, turbidez, amonio, materia orgánica, nitratos y fosfatos). Estos parámetros son muy sensibles a las alteraciones que puede experimentar la calidad del agua, tanto por causas naturales como por otras fuentes de contaminación.
Los datos obtenidos de los equipos de análisis se envían vía satélite o 3G en tiempo real cada 5 minutos al Centro de Control de la Cuenca, donde se gestionan con el uso de aplicaciones especiales por personal cualificado. Esto permite una vigilancia en tiempo real de las principales zonas de vertido de la cuenca, pudiéndose así detectar los vertidos con rapidez y facilitando de este modo la localización de sus posibles causas.
Además de la renovación de las estaciones existentes, el organismo de cuenca va a ampliar la red SAICA con otros cinco puntos de medición situados a en la rambla de El Albujón dónde el punto SAIH, se amplía a SAICA, al igual que el existente en Rincón de Beniscornia (Murcia); río Argos (Calasparra); aguas abajo de Alfonso XIII y, por último, en el municipio de Molina de Segura el que se creará un punto totalmente nuevo.
Finalmente, este proyecto tiene un presupuesto de 970.972,82 euros y cuenta con la financiación de la Unión Europea dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR).