Los investigadores de ambos cuerpos han detenido a los 16 integrantes del grupo criminal como presuntos autores de los delitos de extorsión, robo con violencia e intimidación en viviendas, blanqueo de capitales y pertenencia a grupo criminal
Hasta el momento se han esclarecido ocho hechos delictivos
En los registros efectuados se ha incautado efectivo, armas blancas prohibidas, un vehículo de gama alta y objetos utilizados en la comisión de delitos
La Guardia Civil y la Policía Nacional han desarrollado, de forma conjunta y coordinada, la operación 'Trimal-Onis', una investigación que ha concluido con la desarticulación de un peligroso grupo criminal, con la detención de sus 16 integrantes, que estaba especializado en cometer extorsiones y robos con violencia en casas habitadas con una agresividad desmesurada. Hasta el momento se han esclarecido ocho delitos.
La investigación se inició el pasado verano, cuando algunas víctimas de esta actividad delictiva denunciaron una serie de hechos delictivos consistentes en extorsiones que se estaban llevando a cabo por parte de un violento grupo de personas.
En sus relatos, las víctimas denunciaron que los integrantes y cabecillas del grupo criminal, durante la materialización de estos hechos, empleaban una desproporcionada agresividad y que no dudaban en hacer uso de armas blancas o golpear a sus víctimas con extrema violencia. Algunas de las víctimas, además, han denunciado el uso intimidatorio de armas de fuego durante las extorsiones.
Otros delitos vinculados a este grupo criminal ahora desmantelado son los robos con violencia en casas habitadas, para los que se valían de supuestas armas de fuego y una violencia desmesurada hacia sus moradores con la intención de conseguir el máximo botín posible de la forma más rápida.
Los investigadores han constatado que las cuantiosas sumas de dinero que iban obteniendo de los ilícitos penales cometidos se repartían en diversas cuentas bancarias que dificultaban, en gran medida, el rastro del mismo con el fin de blanquearlo posteriormente.
Violento grupo criminal organizado y jerarquizado
Tras una ardua y exhaustiva tarea de análisis de la información que se iba obteniendo a medida que avanzaba la investigación, los policías nacionales y los guardias civiles identificaron a los integrantes de este grupo criminal y ubicaron su sede en varios barrios de la capital murciana y pedanías del cinturón sur.
La rama del grupo criminal que llevaba a cabo las extorsiones tenía varias secciones con los roles bien estructurados. Los ejecutores: que llevaban a cabo la extorsión mediante amenazas incluso con armas blancas; los ganchos: personas que se encargaban de establecer contacto con las víctimas a través de redes sociales, bien con intención de intimar o establecer fuertes lazos de amistad, para ganar su confianza; y las mulas: que ponen sus cuentas bancarias a disposición del grupo criminal, recibiendo en ellas el dinero de las víctimas y efectuando, inmediatamente después, reintegros en cajeros automáticos para repartir el dinero en efectivo entre los diferentes miembros.
El pasado mes de agosto el grupo criminal utilizó a una mujer como gancho para acceder hasta la vivienda donde una de las víctimas estaba pasando sus vacaciones en La Manga del Mar Menor. Ya en el inmueble, le intimidaron con un machete en el cuello y consiguieron sustraerle más de 20.000 euros. Unos meses antes, a la misma víctima le extorsionaron enviando fotografías de familiares y amenazándole con hacerles daño si no pagaba.
Otra de las víctimas tuvo que trasladarse a vivir temporalmente a un hotel por temor al daño que le pudiera hacer este mismo grupo criminal. Previamente se había visto obligado a vender una vivienda para afrontar los pagos que le iban exigiendo. Llegó a pagar más de 10.000 euros a los extorsionadores.
La otra rama del grupo criminal se encargaba de llevar a cabo delitos de naturaleza aún más violenta. Acometían a las víctimas con armas de fuego dentro de sus viviendas. En los dos robos en viviendas que se le imputan, golpearon a los moradores con las armas de fuego con las que les intimidaban.
El morador de una vivienda de Orihuela Costa (Alicante), al que robaron y golpearon mientras descansaba en su casa junto a su mujer, necesitó más de veinte puntos de sutura en la cabeza, por los numerosos golpes que recibió con la culata del arma de fuego de uno de los asaltantes.
Una vez obtenidos todos los indicios necesarios y previa autorización judicial, los investigadores han llevado a cabo la fase de explotación de la operación en la que ha participado de forma simultánea más de medio centenar de agentes de ambos cuerpos.
En los cuatro registros efectuados se ha incautado armas blancas, efectivo, un vehículo de gama alta y otros objetos relacionados con la actividad delictiva ahora esclarecida.
La fase de explotación de la operación ha culminado con la detención de los 16 integrantes del violento grupo criminal, nueve hombres y siete mujeres, algunos de ellos con un abultado historial delictivo, como presuntos autores de los delitos de extorsión, robo con violencia e intimidación en viviendas, blanqueo de capitales y pertenencia a grupo criminal.
La operación conjunta 'Trimal-Onis' ha sido desarrollada por efectivos del Área de Delitos contra el Patrimonio de la Unidad Orgánica de Policía Judicial (UOPJ) de la Zona de la Guardia Civil de Murcia y de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la Brigada de Policía Judicial de la Jefatura Superior de Policía Nacional de Murcia. Durante los registros, los investigadores han contado con el apoyo de guardias civiles de la Unidad de Seguridad Ciudadana de Comandancia (USECIC) y de policías nacionales de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR).