Un estudio elaborado por CONSUMUR pone de manifiesto la necesidad de mejorar sustancialmente la gestión de residuos no peligrosos (papel/cartón, plásticos/envases y restos orgánicos) en los hospitales públicos de la Región de Murcia

Otras de las conclusiones es el incumplimiento generalizado de la “Ley Antitabaco” y el precio de los aparcamientos

La Asociación de Consumidores y Usuarios en Red, CONSUMUR, ha realizado un estudio en los hospitales públicos de la Región de Murcia a fin de conocer el nivel de reciclaje, valorando la disponibilidad de papeleras de separación de residuos no peligrosos en sus distintas estancias. Otros objetivos del estudio han sido conocer el cumplimiento de la prohibición de fumar en el perímetro de los centros hospitalarios y el coste de los aparcamientos.

CONSUMUR ha visitado durante los meses de agosto y septiembre los siguientes centros hospitalarios: Hospital Virgen del Castillo (Yecla); Hospital General Universitario Reina Sofía (Murcia); Hospital Clínico Universitario Virgen de la Arrixaca (El Palmar – Murcia); Hospital Psiquiátrico Román Alberca (El Palmar – Murcia); Hospital General Universitario Morales Meseguer (Murcia); Hospital General Universitario Santa María del Rosell (Cartagena); Hospital General Universitario Santa Lucía (Cartagena); Hospital General Universitario Los Arcos del Mar Menor (San Javier); Hospital Rafael Méndez (Lorca), Hospital Comarcal del Noroeste (Caravaca de la Cruz) y Hospital de la Vega Lorenzo Guirao (Cieza).

Las zonas visitadas en cada uno de ellos han sido los aparcamientos, el exterior del recinto dentro de su perímetro, administración /admisión, cafetería, sala de espera del área de urgencias, sala de espera de consultas externas, pasillos de las distintas plantas y habitaciones.

Principales conclusiones

Separación de residuos no peligrosos

Entre las conclusiones que se han extraído de las visitas destaca que existe una amplia capacidad de mejora sobre cómo se fomenta el reciclaje entre los usuarios y personal sanitario de los hospitales, dada la escasez generalizada de papeleras de separación de residuos no peligrosos (Papel y cartón (papelera azul), restos orgánicos (papelera negra) y plásticos y envases (papelera amarilla)), dificultando por tanto una buena identificación y separación de los residuos.

En cuanto al exterior, dentro del recinto hospitalario, sólo en el 18,2% (2 hospitales) hay papeleras para distintos tipos de residuos, concretamente para papel/ cartón (azul) y plástico/envases (amarillo). El resto sólo dispone de papeleras generales.

En el interior de los centros, CONSUMUR ha visitado la zona de administración/admisión, donde solamente en el 36,3% (4 hospitales) había instalada una papelera triple (Papel y cartón (papelera azul), restos orgánicos (papelera negra) y plásticos y envases (papelera amarilla)), perfectamente identificada.

La cafetería ha sido otra de las zonas importantes a visitar por la organización, dado el gran volumen de residuos que se generan y la afluencia continua de usuarios. Solamente en un hospital hay disponibles papeleras para los distintos tipos de residuos (papelera triple debidamente identificada).

Otras de las áreas visitadas han sido las salas de espera, tanto de consultas externas como de urgencias. En el caso de las consultas externas, en el 54,5% de los centros (6 hospitales) sí se han observado papeleras para los distintos tipos de residuos, dato muy diferente a la zona de urgencias, donde solamente hay para los distintos tipos de residuos en el 36,3% (4 hospitales).

Los peores resultados se han detectado en los pasillos de las habitaciones y en las propias habitaciones. En los pasillos, salvo en un centro hospitalario donde había una papelera general y otra amarilla, en el resto de los casos no se dispone de papeleras.

En el caso de las habitaciones solamente hay papelera general en el aseo, no habiendo opción para los pacientes ingresados de separar los distintos tipos de residuos.

En términos generales, los peores resultados se han observado en el Hospital Virgen del Castillo de Yecla y en el Hospital Psiquiátrico Román Alberca, en el Palmar-Murcia, no disponiendo de ninguna papelera de separación de residuos.

Los mejores resultados se han observado en el Hospital General Universitario Reina Sofía de Murcia, en el Hospital Rafael Méndez (Lorca), y en el Hospital Comarcal del Noroeste (Caravaca de la Cruz), con mayor presencia de papeleras triples (azul (papel), amarillo (envases) y negro (orgánica)).

Por otro lado, decir que nos consta que algunos hospitales tienen sus propios protocolos para el tratamiento de los residuos que originan a través de su personal en el marco del trabajo que desarrollan, ya sean sanitarios o vinculados a otras funciones, protocolo del que no entramos a valorar su grado de cumplimiento y que era necesario aclarar esto para no confundir con el estudio que llevamos a cabo, y que hace referencia a los destinatarios principales, en este caso, los usuarios/pacientes de la sanidad, aunque no cabe la menor duda que también quedan comprendidos igualmente todo el personal adscrito al hospital.

Para Roberto Barceló Vivancos, presidente de Consumur, “esta situación pone de manifiesto que ni tanto los hospitales públicos, salvo excepciones, como tampoco la Consejería de Salud, de quien dependen los mismos, tienen protocolos claros de actuación al respecto del reciclado de este tipo de residuos y, por tanto, ningún tipo de directriz común al respecto y que repercuta por igual en todos los ciudadanos de la región cuando visitan un centro sanitario público, contrariamente a lo que sucede en comercios y empresas privadas de cierto tamaño, que tienen determinados los mecanismos de recogida y de separación de residuos en sus distintas modalidades, incluso algunos con recipientes para  vidrios, y que están ubicados normalmente a la entrada/salida de los establecimientos”.

Incumplimiento de la prohibición de fumar

La Ley 42/2010, de 30 de diciembre, por la que se modifica la Ley 28/2005, de 26 de diciembre, de medidas sanitarias frente al tabaquismo y reguladora de la venta, el suministro, el consumo y la publicidad de los productos del tabaco, conocida como la Ley Antitabaco, regula, en su artículo 7, los lugares o espacios donde está prohibido fumar, indicando en su apartado c) Centros, servicios o establecimientos sanitarios, así como en los espacios al aire libre o cubiertos, comprendidos en sus recintos.

La normativa especifica claramente que la prohibición no se encuentra solo en el interior del centro hospitalario sino en todo su perímetro, con independencia de que se encuentre al aire libre.

En este sentido, el estudio realizado por CONSUMUR pone de manifiesto el incumplimiento generalizado de esta Ley, dado que en todas las visitas realizadas se han detectado colillas, en la mayoría de los casos en gran cantidad, principalmente en las puertas de urgencias o entrada principal del hospital, aunque también en el exterior de la cafetería. La organización se ha mostrado sorprendida ante la impunidad de la vulneración de la normativa, máxime tratándose de centros sanitarios, dado que incluso ha presenciado a personal de los mismos fumando, inclusive en los pasillos de las habitaciones; o usuarios haciéndolo junto a personal de seguridad, entre otras situaciones, lo que pone de manifiesto la falta de control que existe, hecho contrapuesto con la información disponible sobre la prohibición de fumar, habiendo por lo general un importante número de carteles, tanto en el interior como en todo el perímetro de los centros hospitalarios.

Para el presidente de Consumur “hay cierto mirar para otro lado de parte del personal sanitario -algunos incumpliendo también la normativa como se ha puesto de manifiesto- como de quienes tienen responsabilidades de gestión en los hospitales, dado que si de verdad se quisiera tomar medidas al respecto (más en un lugar tan sensible como un hospital que debiera ser escrupuloso por tratarse de un asunto tan importante como la salud), se habría hecho y no solo a nivel informativo y educativo, sino también con carácter coercitivo.

Algunos responsables de hospitales empatizan con situaciones donde hay familiares que están viviendo una situación complicada clínicamente. La cuestión es que, si se entiende que se debe relativizar la ley en su aplicación, según qué casos, deberá modificarse y, sino, deberá aplicarse para todos por igual”.

Aparcamientos

En relación al estacionamiento en los centros hospitalarios, la organización ha querido verificar con este estudio si el mismo supone coste o no para los usuarios, y las diferencias de tarifas existentes.

En este sentido, el 45,4% (5 de los 11 visitados) de los hospitales visitados cuentan con aparcamiento con coste.

En cuanto a las tarifas, las más elevadas son las del aparcamiento del Hospital General Universitario Morales Meseguer de Murcia, siendo el precio/hora de 3,00 euros y un máximo diario de 34,44 euros. Le sigue el aparcamiento del Hospital Reina Sofía de Murcia, que aún siendo gestionado por la misma empresa que el del Morales Meseguer (empresa New Capital), las tarifas son un 24% más económicas (precio/hora: 2,28 euros y un máximo diario de 28,03 euros).

Seguidamente se sitúa el aparcamiento del Hospital Clínico Universitario Virgen de la Arrixaca de Murcia, gestionado por la empresa Isolux Corsán Aparcamientos. El precio/hora es de 1,80 euros, siendo el máximo diario de 20,05 euros.

Por el contrario, las tarifas más bajas son las gestionadas por la empresa iPark – Accelera en los aparcamientos del Hospital General Universitario Santa Lucía de Cartagena y del Hospital General Universitario Los Arcos del Mar Menor de San Javier. En ambos casos el precio/hora es de 0,85 euros y el máximo diario de 2,37 euros. En el caso del Hospital Santa Lucía cuenta también con un aparcamiento cubierto, con un precio/hora de 0,95 euros y un máximo diario de 2,66 euros.

El resto de hospitales tienen aparcamientos sin coste alguno para el usuario habiendo adoptado la modalidad, por tanto, de gratuitos.

CONSUMUR siempre ha defendido que los aparcamientos situados en los centros hospitalarios cumplen un cometido de servicio público esencial, por lo que no pueden ser gestionados por empresas privadas, dado que los usuarios que hacen uso de estos no lo hacen por motivos de ocio, sino para desempeñar su trabajo, por problemas propios de salud o para visitar a familiares y allegados ingresados.

Este argumento fue expuesto por la organización al Consejero de Salud de la Región de Murcia, D. Juan José Pedreño Planes, durante una sesión del Consejo de Salud de la Región de Murcia en 2022, considerando el mismo como ciudadano, considerando  excesivo el coste del aparcamiento, concretamente de la Arrixaca, aunque por extensión el de todos ellos, comprometiéndose a revisar dichas tarifas.

Esta afirmación se contradice con las declaraciones que realizó en marzo del pasado año, tras la petición de un partido político en la Asamblea Regional de implantar la gratuidad en todos los aparcamientos de los hospitales públicos, manifestando el Consejero, entonces, que su prioridad era la de mejorar la calidad asistencial mientras que el tema de los aparcamientos podía prorrogarse hasta 2027.

Ante este planteamiento, el presidente de Consumur valora “como falta de sensibilidad del Consejero al manifestar en determinados foros su comprensión a las demandas ciudadanas al respecto, como es en el Consejo Regional de Salud (¿con qué finalidad?), para luego no responsabilizarse en el marco de la legislatura actual teniendo en cuenta que la misma finaliza en el año que dice que se revisarían las tarifas, es decir, a la conclusión de su mandato.

El Consejero tiene la obligación de defender los intereses de los ciudadanos y no anteponer los negocios privados en el marco de un espacio público, aunque ni una situación ni otra son incompatibles, pero si hay que establecer un ‘triaje’ la prioridad, no nos cabe la menor duda en Consumur dónde debe estar, y no por demagogia, sino por derecho”.