El consejero de Salud mantuvo un encuentro con los responsables de esta sección, donde se han invertido cerca de 1,2 millones en nuevos equipos

La Sección de Hemodinámica del Servicio de Cardiología de la Arrixaca acaba de remodelar una de sus salas para atender a pacientes con enfermedad coronaria o estructural, con el fin de favorecer los tratamientos y ofrecer la máxima calidad asistencial.

Esta renovación, tanto de las instalaciones como de la tecnología que se emplea, se traduce en una mayor agilidad en la programación de los pacientes, al mismo tiempo que supone una mejor ergonomía técnica para el trabajo del equipo profesional.

El consejero de Salud, Juan José Pedreño, visitó hoy el hospital Virgen de la Arrixaca, donde mantuvo un encuentro con los responsables de la Unidad de Hemodinámica, "situada, por el número de procesos y resultados, entre las más importantes del país y desarrolla una notable actividad asistencial en sus tres salas", explicó.

Desde este equipo se asiste la patología estructural de toda la Región (valvulopatías, cardiopatías congénitas de adulto, etc.) y la coronaria de las áreas de salud Murcia Oeste, Lorca, Noroeste, Altiplano, Vega media del Segura, Murcia Este y Vega Alta.

La Unidad atiende a una media de más de 2.500 pacientes al año y realiza unos 4.600 procesos diagnósticos y terapéuticos.

La ampliación del espacio de trabajo, la modernización de la climatización, iluminación y monitorización del proceso, y la renovación del equipo radiológico, ha supuesto una inversión total de 1.173.000 euros provenientes del marco de Fondos Feder 2014-2020 eje REACT-UE de la Región de Murcia, y de la Unión Europea-NextGeneration EU, en el marco del Plan INVEAT. A ello, hay que añadir la adquisición de un aparato de ecocardiografía transtorácica y transesofágica, por importe de 125.000 euros, para valorar el funcionamiento cardiaco, diagnosticar complicaciones, guiar procedimientos y ayudar en la realización de punciones vasculares.

Más seguridad

El consejero destacó que el nuevo equipamiento, "el más avanzado existente en la actualidad, permite realizar pruebas diagnósticas y terapéuticas con más seguridad, debido a que ofrece mayor calidad de imagen al tiempo que necesita menor radiación para visualizar las estructuras dañadas".

Incorpora un arco con brazo robotizado, que posibilita mayor movimiento de la camilla, por lo que mejora el acceso y precisión de la zona que se va a tratar, además de una pantalla de imágenes de gran formato con los últimos programas informáticos.

La versatilidad de la nueva sala garantiza la programación sin incidencias de pacientes y el tratamiento endovascular de patologías estructurales complejas, que antes no era posible llevarlo a cabo por cardiología intervencionista, como el implante de válvulas aórticas percutáneas.