El Museo Regional de Arte Moderno (MURAM) inaugura mañana jueves, Día Internacional de los Museos, la exposición 'Dios iberoamericano. Díaz Burgos', en la que el autor muestra un trabajo fotográfico gestado a lo largo de toda una vida profesional dedicada a obtener un registro visual de la tradición cultural y religiosa latinoamericana.
El relato que construyen las obras pretende una reflexión antes que una afirmación. Se trata de fotografías enfrentadas en dípticos que dibujan una visión de lo español y lo iberoamericano, un juego de simbolismos religiosos paralelos y a la vez contradictorios que actúan como una sugerencia abierta a la interpretación particular.
El fotógrafo, que ha dedicado toda su carrera a captar diferentes aspectos de la naturaleza humana y los comportamientos y modos de vida de la gente que ha ido encontrando, ha dedicado gran parte de su labor a humanizar lo que veía tanto en España como en América Latina, especialmente en República Dominicana, Haití, México, Perú, Guatemala o Cuba, donde ha retratado a gente anónima y plasmado sus deseos, miedos, sueños y otros sentimientos comunes a todos los seres humanos.
La muestra, que se podrá visitar hasta el mes de noviembre, se compone de 69 dípticos con 138 fotografías documentales donde queda patente el concepto acuñado por el francés Henri Cartier-Bresson sobre el 'instante decisivo', que hace referencia a que la imagen obtenida sería totalmente diferente si el disparo de la cámara se hubiera producido medio segundo antes o después. De esta manera, se conserva un instante que de otro modo se habría perdido para siempre.
Juan Manuel Díaz Burgos suma a la acción fotográfica directa una labor reflexiva, conseguida gracias a la revisión y reorganización de sus archivos para poner en contraste las imágenes de contenido religioso captadas en diferentes lugares. Mediante dípticos de fotografías que originariamente no fueron concebidas para estar juntas, el espectador obtiene nuevas lecturas de enorme interés antropológico.
Similitudes y diferencias
La propuesta de Díaz Burgos es una confrontación de imágenes de contenido religioso, ritual, simbólico y antropológico de la influencia de la religión católica y sus manifestaciones en los dos continentes: el exportador, España; y el receptor, América Latina.
Lo que este trabajo pretende es evidenciar las similitudes y diferencias que perviven al enfrentar dos imágenes de ritos religiosos que documentan dos formas de expresión estética y ritual: la de la vieja metrópoli, reivindicadora de la tradición secular, y la del Nuevo Mundo, construido sobre la cultura indígena.
Las imágenes revelan elementos comunes en todas las ceremonias religiosas de distintas confesiones, lo que pone de manifiesto que las preguntas sobre la vida eterna y los sentimientos de angustia ante la muerte son universales y propios de la condición humana.