Según los últimos datos facilitados por la Encuesta de Población Activa (EPA), el segundo trimestre del año ha finalizado con 35.400 trabajadores ocupados en el sector de la construcción. Esto supone una pérdida de 4.100 trabajadores respecto al trimestre pasado, y de 9.700 en el último año, lo que supone un retroceso del 21,5%, datos no vistos en el sector desde principios de 2018.
Salvo la construcción, el resto de sectores ganan trabajadores. 11.900 en el sector servicios, 6.100 en la industria y 1.900 en agricultura.
Esto determina que, en el último trimestre, la Región de Murcia haya incrementado en 15.800 el número de trabajadores, al pasar de los 643.300 del primer trimestre de 2022, a los 659.100 actuales.
A diferencia de lo que ha sucedido en el sector de la construcción en la Región de Murcia, a nivel nacional, el sector gana trabajadores este trimestre. En concreto, son 21.900 nuevos trabajadores los que se han incorporado a la construcción, aunque también se percibe cierta desaceleración pues en el último año el sector apenas ha ganado 13.400 trabajadores en toda España.
La Región de Murcia es la tercera comunidad autónoma que más ocupados pierde (4.100), solo por detrás de Andalucía, con 7.300 ocupados menos y Canarias, con 6.000 ocupados menos.
Estos datos son especialmente negativos en nuestro sector, ya que el segundo trimestre del año es tradicionalmente un trimestre muy positivo para el empleo en el sector. Salvo en 2020, año marcado por la pandemia en que se perdieron 500 trabajadores, los años precedentes arrojan una media de 3.200 nuevos trabajadores en el sector. Este año 2020 hemos perdido 4.100 trabajadores.
Por otro lado, los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA), del segundo trimestre del año, dejan un descenso de 600 desempleados en el sector en el último trimestre, al pasar de 4.600 a 4.000 el número de desempleados, lo que resulta especialmente preocupante, pues se pierde población activa en el sector. Es decir, perdemos tanto ocupados como desempleados.
VALORACIÓN DE LOS DATOS DE EMPLEO POR PARTE DE FRECOM
FRECOM valora muy negativamente los datos de empleo en el sector, ya que supone un retroceso muy importante. Ante la ralentización de la actividad económica y del empleo en el sector que percibimos, el trimestre pasado ya se advirtió que, o se tomaban medidas valientes y contundentes o el sector perdería actividad y puestos de trabajo.
Los datos del segundo trimestre del año 2022 están motivados por varios factores, entre los que merece la pena destacar los siguientes:
El extraordinario incremento de precios que están experimentando las materias primas y materiales de construcción está afectando a la viabilidad de muchos proyectos en curso, tanto de obra pública como de edificación privada, lo que sin duda está redundando en la contratación y el empleo.
Laescalada sin precedentes de losprecios de la energía y combustibles está afectando de lleno al sector y haciéndole perder competitividad.
El plan de recuperación económica y los fondos europeos no están llegando al tejido productivo con la cuantía y la rapidez que se esperaba. Las pymes del sector no saben lo que son los fondos Next Generation.
Los retrasos en la gestión administrativa en general, y la normativa de zonas inundables en particular, está paralizando la actividad de los principales municipios de la Región de Murcia y provocando que muchos inversores reconsideren a nuestra Región como destino de sus inversiones por la gran incertidumbre existente.
La excesiva carga fiscal que están soportando las empresas y autónomos les está asfixiando.
Desde FRECOM seguimos reivindicando que se adopten medidas que permitan el normal desarrollo de la actividad económica en un sector muy intensivo en mano de obra.
En este sentido es necesario compensar las pérdidas por las subidas de precios de los materiales y materias primas en construcción. Los diferentes reales decretos leyes para revisar los precios de la obra pública, excluyen al 95% de los contratos.
Las distintas administraciones públicas tampoco están siendo receptivas a viabilizar los contratos públicos con el resto de herramientas legales existentes.
Hay que imprimir más agilidad a la gestión de los fondos europeos, así como llevar a cabo una política de inversión acorde al protagonismo e importancia del sector como motor económico y de generación de empleo.