El Gobierno regional ha acordado con las organizaciones agrarias, Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja) y Unión de Pequeños Agricultores (UPA), y la Federación de Cooperativas Agrarias de Murcia (Fecoam) trasladar al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación un documento consensuado en el que se vuelve de dejar constancia de las preocupaciones e inquietudes que generan en el sector determinados aspectos del Plan Estratégico Nacional de la futura Política Agraria Común (PEPAC).

Así lo manifestó hoy el consejero de Agua, Agricultura, Ganadería, Pesca, Medio Ambiente y Emergencias, Antonio Luengo, tras reunirse con los representantes de las organizaciones indicadas, para preparar el Consejo Consultivo de Política Agrícola del próximo lunes, en el que la Región de Murcia volverá a fijar sus posición ante el desarrollo de la nueva PAC.

Luengo aseguró que "esta PAC sigue sin recoger las necesidades de nuestra región, a pesar de nuestras insistentes demandas de la mano del sector. El presumible objetivo de la PAC es que las ayudas vayan destinadas a quienes se llenan los pies de tierra, al agricultor profesional, pero los planteamientos que se nos dan a conocer no responden a ese postulado".

"El resultado de la negociación por parte del Gobierno de la Nación es una reducción del presupuesto de la PAC en un 10 por ciento, lo que se traduce en unos 5,4 millones de euros menos para la Región de Murcia", recalcó el consejero.

El documento que el titular de Agricultura presentará al Consejo Consultivo demanda la supresión de los derechos históricos, "algo a lo que se comprometió el ministro, pero que no ha tenido reflejo en los acuerdos"; precisó. Asimismo, se solicita un reparto más equitativo de las ayudas, "porque siguen existiendo demasiadas regiones para el reparto y es un planteamiento injusto, donde no se recoge la realidad agraria, ya que no reciben más aquellos a quienes más les cuesta producir, como es el caso del sector agrario murciano. Además, la futura ayuda redistributiva intenta compensar la mala conformación de regiones, y lo que hace es perjudicar a las pequeñas explotaciones".

Por otra parte, los agricultores de frutos secos perderán ayudas debido a los parámetros que ha definido el Ministerio. Tal y como está planteado en la actualidad, las futuras ayudas asociadas a los frutos secos dejarán 44.000 hectáreas fuera, ya que no cumplen con al menos uno de los dos criterios de desertificación planteados, entre las que destaca el 55 por ciento de cultivo de almendro. "Además, los ganaderos de la Región van a perder en torno a 3,5 millones de euros por las condiciones acordadas por el Ministerio", subrayó Luengo.

Igualmente, la herramienta que se define para poder cumplir con los requisitos medioambientales (ecoregímenes) "sigue sin contemplar las medidas que permitan una gestión adecuada del suelo. Los ecoregímenes están hechos a espaldas del sector agrario murciano, ya que la gran mayoría de agricultores y ganaderos de la Región no van a acogerse a ningún ecoesquema", aseguró el consejero.

En 2021, el pago verde ascendió a 14 millones de euros, "cuantía que se puede perder, ya que una PAC verde que arroje números rojos dará lugar al abandono de superficies y al cierre de explotaciones agrarias", afirmó Luengo.