En la tarde de ayer, compareció en rueda de prensa la portavoz de Valores Región de Murcia, Diana Corrales, tras la reunión del Comité de Dirección de Valores, presidido por la Secretaria General Isabel Vicente, y en la que se analizó la situación actual de la política regional.
Para Diana Corrales: "no es bueno para la Región de Murcia un gobierno sin alma y sin proyecto, más allá de sobrevivir hasta las próximas elecciones". Esta reflexión es consecuencia de analizar las últimas fotos del presidente de la Región y el esperpento del cese, durante tres horas, del Director de la Biblioteca Regional, fruto del gallinero en el que se ha convertido el puzzle de Consejerías tras la fallida moción de censura de hace un año.
Por todo ello, y para que los murcianos puedan ir tomando sus propias decisiones, la portavoz de Valores, Diana Corrales, ha lanzado al Presidente del Consejo de Gobierno de la Región de Murcia dos cuestiones:
¿Qué herramientas, instrumentos y medios va a utilizar para proteger a las empresas y el medio rural? No es suficiente con hacerse fotos.
¿Qué medidas va a tomar para poner orden en las Consejerías y asumir la responsabilidad que afecta a la Consejería de Política Social, Familia y demás etcéteras que ha sido censurada por su nefasta gestión según el último informe emitido por el Tribunal de Cuentas? Pedimos responsabilidades políticas.
Para Corrales, queda claro que el ridículo no le importa al Presidente, siempre y cuando sus diputados (advenedizos inclusive) voten la reforma electoral que elevaría al 5% el mínimo de sufragios para obtener representación en la Asamblea Regional, secuestrando así la Democracia y el sentir de los murcianos.
Por todo ello, exigimos a Fernando López Miras, primero que mande, y segundo que ponga orden inmediatamente en la gestión política, ante la pasividad y la pésima gestión que tiene paralizada las respuestas que necesitan los murcianos.
"Él y sólo él, tiene en su mano cambiar el rumbo que exigen las actuales circunstancias y no seguir manteniendo un gobierno artificial e incompetente", finalizó Diana Corrales.