La portavoz regional de Podemos asegura desde la manifestación del Día por la Erradicación de la Violencia de Género que la ausencia de políticas de igualdad del Gobierno regional "contribuye a la expansión de comportamientos machistas en la sociedad" y exige "medidas concretas de prevención, detección y apoyo a las víctimas, dotadas con los recursos económicos enviados por el Gobierno de España"

El 25 de noviembre ha sido nuevamente una fecha histórica en 2.021 por la movilización masiva de mujeres en todo el mundo para exigir a todos los gobiernos medidas políticas dirigidas a la erradicación de la violencia de género. En la capital regional, miles de personas han inundado las calles del centro en la manifestación convocadas por los colectivos feministas de la ciudad. Junto a ellas, ha estado la portavoz regional de Podemos, María Marín, quien ha asegurado que las mujeres "están construyendo una alternativa a López Miras y sus aliados de la extrema derecha más machista y retrógrada". Marín ha calificado al Gobierno autonómico como "el Gobierno más reaccionario de toda España" y ha señalado que "los aliados ultraderechistas de López Miras, con el visto bueno del presidente, han fijado su punto de mira en la lucha contra la igualdad de género". La diputada ha apuntado como ejemplo de esta connivencia de López Miras con las políticas contra las mujeres "las arremetidas del ejecutivo contra el lenguaje inclusivo, contra la asignatura de valores cívicos o los intentos de implantar el veto parental contra las charlas contra el maltrato y por el respeto a la diversidad sexual y de género".

Frente a lo que considera "un gobierno dispuesto a desmantelar más de cuatro décadas de avances por la igualdad", Marín ha asegurado que desde Unidas Podemos están "construyendo una alternativa feminista, ecologista y mucho más democrática y transparente", que "acabe de una vez con los recortes a la igualdad y ponga en marcha políticas que realmente contribuyan a progresar hacia una sociedad más justa". La diputada ha señalado que la mejor muestra de esa alternativa está en las medidas que se están tomando desde los ministerios de Unidas Podemos, "especialmente desde el Ministerio de Igualdad, con leyes como la conocida ley del "sólo sí es sí", pero también desde otros ámbitos como el Ministerio de Derechos Sociales de Ione Belarra, impulsando medidas de emancipación para jóvenes, o desde el Ministerio de Trabajo, donde la lucha contra la discriminación laboral y la brecha de género están hoy en el centro de la acción política".

Por otra parte, la diputada ha recordado que desde 2019, año de la irrupción de la extrema derecha en el Congreso de los Diputados y en la Asamblea Regional, "no ha podido aprobarse en ninguna de las dos cámaras una declaración institucional de condena a la violencia de género". Para la portavoz, esto es "la demostración del peligro que suponen para los avances sociales de todo orden, especialmente para la independencia de las mujeres". Marín ha defendido la unidad de las mujeres en la calle, juntando nuestras voces para decir bien claro que no vamos a dar ni un paso atrás en igualdad".

Por último, Marín ha exigido a López Miras y a la Consejera de Igualdad, la vicepresidenta Isabel Franco, que dejen de "bloquear los fondos que llegan desde el Gobierno de España" y pongan en marcha "las inversiones necesarias para llevar a cabo políticas concretas". La diputada de Podemos ha recordado que desde el Ministerio de Trabajo "se han transferido más casi siete millones y medio de euros para fines concretos, como la construcción de un centro de atención integral para mujeres víctimas de violencia sexual, o el desarrollo de medidas de conciliación, así como el reconocimiento y compensación a aquellas mujeres que han desarrollado labores de cuidados durante toda su vida, y que llegan a la vejez con pensiones muy bajas". "López Miras debe de abandonar de una vez la agenda de la extrema derecha y ponerse a trabajar por los derechos de todos los ciudadanos y ciudadanas. La lucha contra la violencia machista no es un asunto ideológico, sino que salva vidas de mujeres, y no puede ser moneda de cambio para mantenerse en un sillón", ha concluido Marín.