La hostelería murciana ha mostrado sus quejas por la lentitud en el levantamiento de las restricciones anti-COVID por parte de la Consejería de Salud, que ayer autorizó una hora más de apertura para los negocios no esenciales. "Siempre somos la comunidad que más prisa tiene en instaurar limitaciones al sector hostelero y luego la última en quitarlas. Con esta actitud lo que el Gobierno regional está haciendo es acabar con cientos y cientos de negocios antes de que vuelva la normalidad", se lamenta Jesús Jiménez, presidente de la Federación Regional de Empresarios de Hostelería y Turismo Región de Murcia (HoyTú).
Para acelerar la vuelta de diversas prácticas en la hostelería -como el uso de las barras, tal y como sucede en otras comunidades autónomas- la patronal reclama el uso del pasaporte Covid, en un momento en el que cerca del 80% de la población está vacunada. "Hay que dar más pasos y eliminar restricciones, como por ejemplo estamos viendo en Madrid. Hasta ahora se ha hecho muy poco en la Región de Murcia y estamos sufriéndolo. Medidas como pedir el pasaporte Covid o test de antígenos nos ayudaría a volver a la normalidad en nuestros locales y a la Administración incrementar el índice de vacunados", apunta Jiménez.
Poco rentable
Además, muchos empresarios -especialmente del ocio nocturno- han preferido no abrir con las restricciones actuales porque pierden aún más dinero levantando la persiana. "Poner en marcha los negocios con las limitaciones actuales no es rentable en muchos casos", informan desde la patronal.
Unas medidas anti-COVID las que se aplican actualmente en la Región de Murcia que para los hosteleros siguen fomentando lo que vienen denunciando desde hace meses: la proliferación de fiestas privadas incontroladas, los botellones y la fuga del ocio y las celebraciones a provincias limítrofes con normativa más flexible.
Por todo ello, desde HoyTú requieren urgentemente un nuevo plan de ayuda para el sector, especialmente para el ocio nocturno. "La hostelería en general trabaja con el freno de mano puesto y eso genera muchas pérdidas desde hace meses. En el caso de los pubs y discotecas la situación es mucho peor", reflexiona Jiménez, que se duele de que -en el fondo- todo responde a una estigmatización infundada de los negocios hosteleros.