SATSE reitera su llamamiento a la prudencia y responsabilidad del conjunto de la ciudadanía para que, tras la relajación de algunas medidas establecidas durante el Estado de Alarma, no se sigan generando situaciones "que ponen en claro riesgo su salud y seguridad".

El Sindicato de Enfermería, SATSE Murcia, ha reclamado al conjunto de administraciones públicas que dejen de lado intereses partidistas y particulares y afronten la lucha contra el Covid-19 tras el fin del Estado de Alarma de manera conjunta y coordinada porque "el virus no entiende de siglas ni de consignas políticas".

SATSE subraya que, pese a las últimas cifras de incidencia de la pandemia relativamente esperanzadoras, el virus continúa muy presente en el país y en la Región, por lo que sigue siendo absolutamente necesaria una respuesta coordinada y eficaz por parte del Gobierno estatal y los de las comunidades autónomas para evitar nuevas olas "que supongan un claro retroceso en lo conseguido hasta el momento", declara el secretario general autonómico del Sindicato en Murcia, José Antonio Blaya.

Por ello, la organización sindical critica los continuos cruces de acusaciones y reproches entre responsables de partidos y administraciones de distinto signo político, atribuyéndose los unos y los otros la responsabilidad de aquellas medidas y actuaciones que no tienen un resultado positivo para el conjunto de la ciudadanía.

"Las enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas, al igual que el conjunto de la sociedad, están asistiendo a escenas dantescas más propias de un sainete en las que administraciones y partidos se dedican a buscar culpables en lugar de mostrar la unidad de acción que, tras el Estado de Alarma, seguimos necesitando en todo lo que

se refiere a las medidas preventivas y de protección social, la campaña de vacunación, etc…", apunta.

Asimismo, SATSE destaca que se ha constatado que el consenso alcanzado entre los diferentes partidos políticos con responsabilidades de Gobierno en la Comisión para la Reconstrucción Social y Económica de nuestro país ha sido dinamitado por sus propios artífices. "Vemos, una vez más, que prima el frentismo y la confrontación en aras a lograr mayores espacios de poder y representatividad en lugar del bien e interés común", añade.

De otro lado, el Sindicato de Enfermería reitera su llamamiento a la prudencia y responsabilidad del conjunto de la ciudadanía para que, tras la relajación de algunas medidas establecidas durante el Estado de Alarma en el conjunto del Estado, y la previsión de la relajación de más medidas en la Región tras volver a bajar un 10 por ciento la incidencia, "no se sigan generando situaciones que ponen en claro riesgo su salud y seguridad".

"Como profesionales sanitarios que hemos visto las terribles consecuencias del Covid-19 en cientos de miles de personas, con un alto coste en vidas humanas y sufrimiento generalizado, no podemos estar más preocupados porque comportamientos irresponsables e incívicos agraven una situación que, poco a poco y con un alto coste, está empezando a normalizarse", afirman desde la organización sindical.

En este sentido, SATSE demanda a las distintas administraciones públicas que refuercen las estrategias y campañas de información y sensibilización social para que el conjunto de la ciudadanía, y, especialmente, aquellos colectivos con más predisposición a saltarse las medidas preventivas y de protección, sea muy consciente de que la lucha contra el Covid-19 no ha acabado en modo alguno y que se requiere del esfuerzo y compromiso de todos y todas para conseguirlo lo más pronto posible.

Finalmente, el Sindicato de Enfermería hace un llamamiento a avanzar en la vacunación, preocupado por el hecho de que muchos murcianos estén rechazando vacunarse con AstraZeneca. Hasta el momento, más del 30 por ciento de la población de la Región ya ha recibido, al menos, la primera dosis. Entre los mayores de 80 años, la cobertura es del cien por cien; entre 70 y 79 años, del 92; y en la franja de entre 60 y 69 años ya se alcanza el 77 por ciento. Esta semana están citadas para vacunarse 100.000 personas.