La instalación de cubiertas vegetadas en edificios permite, por su capacidad para retener agua, reducir en un 40 por ciento las escorrentías procedentes de las lluvias torrenciales que se pueden aprovechar para el crecimiento de las plantas que componen la propia cubierta.
La mitigación del efecto de las inundaciones es uno de los beneficios que conllevan estas instalaciones, que promueve la Comunidad dentro de la Estrategia de Arquitectura y Construcción Sostenible (EACS), que se han expuesto esta mañana en una jornada técnica, con más de 70 asistentes, donde se han conocido casos de éxito en ciudades como Barcelona.
El consejero de Fomento e Infraestructuras, José Ramón Díez de Revenga, puso de manifiesto durante la inauguración del foro las ventajas de estas cubiertas ecológicas que "tratan de llevar a las azoteas de las ciudades el manto verde del campo, renaturalizando así los entornos urbanos con el objetivo de luchar contra el cambio climático y mejorar la calidad de vida de las personas".
"Mediante una intervención de cubierta vegetada se espera contribuir no solo a la transformación verde urbana y a la eficiencia energética, sino también a crear conciencia sobre la importancia de preservar el medio ambiente promoviendo la participación de los ciudadanos en la creación y uso de estas instalaciones", explicó Díez de Revenga.
La jornada contó con la participación de los arquitectos Joaquín Ruiz Piñera y Bartumeu Antich García quienes explicaron que este tipo de instalaciones que se componen de plantas autóctonas herbáceas también suponen el "secuestro de carbono" ya que se puede cifrar como media de una tonelada de carbono por metro cuadrado de cubierta verde en un periodo de un año.
Las cubiertas vegetadas también mejoran el rendimiento de los paneles solares, pudiendo generar hasta un 16 por ciento más de energía, ya que las plantas actúan como sistema natural de enfriamiento para los paneles solares. Asimismo, se puso en valor que estas instalaciones captan partículas contaminantes y aumentan la biodiversidad al permitir albergar especies autóctonas de gran valor ambiental.