El PP ha exigido a Diego Conesa que "salga de su escondite y dé la cara en defensa de los regantes y agricultores" y se sume en contra del "atentado que afecta a tres millones de españoles"
"La ministra Ribera solo busca hacer daño a la Región de Murcia y a un sector productivo, como la agricultura, esencial para nuestra economía" ha manifestado Cano
El Partido Popular ha pedido una reunión urgente de la Comisión Especial el Agua de la Asamblea Regional para que alegue en contra de la modificación de las reglas de explotación del Trasvase-Tajo Segura, tras el respaldo del Consejo Nacional del Agua al cambio propuesto por el Ministerio para la Transición Ecológica.
El diputado del PP, Jesús Cano, ha advertido que, con la modificación de las reglas de explotación del Trasvase a espaldas del Levante español, "se firma la partida de defunción del Acueducto, siguiendo la hoja de ruta socialista marcada por Pedro Sánchez sin importar el perjuicio que con esta decisión unilateral se hace a nuestros agricultores y regantes".
Tras la postura del Consejo Nacional del Agua queda claro que el único objetivo marcado por la ministra Ribera es el de "hacer daño a la región de Murcia y a un sector productivo esencial para nuestra economía como la agricultura". "Su decisión arbitraria supone reducir los envíos de agua en un 39 por ciento del agua para regadío y una subida del 22 por ciento en los costes del agua" y, con ello, "se rompe el acuerdo político más importante en materia hídrica, la Ley del Memorándum".
Cano espera en que el "PSRM-PSOE se ponga del lado de la Región de Murcia y exija a Sánchez que cumpla los acuerdos del parlamento murciano y no modifique las reglas del juego vigentes" porque "hasta el momento el Ministerio ha hecho caso omiso a los acuerdos parlamentarios que le han instado a no restringir los derechos consolidados adquiridos por los regantes y agricultores".
Así, ha exigido a Diego Conesa que "salga de su escondite y dé la cara en defensa de los agricultores y regentes" y se posicione en contra del "atentado que afecta a tres millones de españoles y se aleje de la teoría de que la desalación debe ser el fin, sino que es un complemento a la cuenca deficitaria que es ejemplar en el uso del agua y su máximo aprovechamiento". "Son siete los ataques consumados del Gobierno socialista al Trasvase Tajo -Segura que cuentan con la más rotunda oposición del Gobierno de López Miras".
Para Cano está claro que "el PSOE, al igual que hizo con el trasvase del Ebro, quiere terminar con el del Tajo" porque "sigue dando pasos bajo el consentimiento de Diego Conesa que sigue sin pronunciarse contra este ataque sin precedentes". Cano confía en que el PSOE y las demás fuerzas políticas con representación en la Asamblea tengan altura de miras y se posicionen junto al Gobierno de López Miras en contra de estos ataques que de ninguna manera vamos a permitir":