Según denuncia la asociación la mayoría de los auxiliares de conversación que dependen de la CARM serán contratados a partir del día 1 de enero privando, durante todo un trimestre, a parte del alumnado de la posibilidad de aprovechar este recurso para mejorar sus competencias orales en lenguas extranjeras.
Normalmente los auxiliares de conversación, independientemente de cuál sea la administración educativa que los contrate, comienzan a trabajar el día 1 de octubre. Sin embargo, tal y como denuncia la Asociación de Profesores de Francés de la Región de Murcia (APFRM), este año la mayoría de los auxiliares contratados por la Consejería de Educación no comenzarán a trabajar hasta el día 1 de enero frente a los que dependen del Ministerio que serán contratados en la fecha habitual. Esto creará una situación de discriminación entre el alumnado que tenga la suerte de que su auxiliar de conversación sea enviado por el Ministerio, frente a los que les toque un auxiliar contratado por la Consejería.
Según fuentes de la administración consultadas por la APFRM, este retraso en la fecha de contratación es debido a la crisis de la COVID. Sin embargo, tal y como denuncia la APFRM, este no puede ser el verdadero motivo de ese retraso porque, de un lado, nada indica que el 1 de Enero la situación de evolución de la pandemia vaya a mejorar y, de otro, el curso pasado, en el período más duro de confinamiento, los auxiliares de conversación hicieron un gran papel empleando herramientas telemáticas para ayudar al alumnado a mejorar sus competencias orales en lenguas extranjeras. En este sentido, la asociación considera que es necesario contratar a los auxiliares en la fecha habitual y que este retraso es debido a "la falta de altura de miras de una administración que, en unas circunstancias muy difíciles, decide ahorrar a costa del aprendizaje de lenguas extranjeras del alumnado de la Región", según palabras de su presidenta Juani Orenes.
La APFRM exige a la Consejería de Educación que no prive al alumnado de este recurso tan valioso para el aprendizaje de lenguas extranjeras y contrate a sus auxiliares de conversación en condiciones de igualdad con los contratados por el Ministerio. La asociación considera que no es tolerable la política de maltrato a la enseñanza de idiomas mantenida por la administración regional, que ahora se ceba sobre los auxiliares de conversación, pero que durante los últimos años se ha centrado en cercenar la enseñanza de una segunda lengua extranjera en nuestro sistema educativo.
Además, la asociación denuncia también que la mayoría de grupos de francés en los institutos son grupos mezclados de varios grupos, con el consiguiente peligro de cruce de contactos en caso de haber algún positivo en Covid-19.