Desde la Federación de AMPAS de Cooperativas de Enseñanza consideran que se debería trabajar de forma conjunta con la Consejería de Educación para establecer entornos seguros y facilitar la conciliación
El presidente de la Federación de AMPAS de las Cooperativas de Enseñanza de la Región (Fampace), Rafael Martínez, pide que "se hagan propuestas por parte de todos los miembros de la comunidad escolar para ayudar a un inicio de curso seguro, en lugar de utilizar esta situación para hacer demagogia y críticas no constructivas".
Como explica Martínez, "somos conscientes de lo compleja de la situación, de lo mucho que nos jugamos a partir de septiembre, y conocemos muchas de las recomendaciones que los expertos en salud. Aun así no podemos estar seguros 100% de no exponernos al virus en algún momento".
"Igual ocurre con la vuelta a las clases de nuestros hijos, todos queremos o deseamos que se produzca con la mayor normalidad posible, que sea totalmente presencial y que no se produzca un aumento en los contagios por esta causa".
Y subraya que "todas las familias queremos sin duda que se tomen todas las medidas de seguridad que nos dictan los expertos, estoy seguro que nadie querría lo contrario, pero no podemos caer en exigir sin proponer, sin presentar propuestas, porque se convierte en demagogia".
"En un momento tan delicado que requiere de la responsabilidad de todos y cada uno de nosotros, creemos que hay que buscar el pragmatismo y asumir que muchas de nuestras demandas ya están contempladas en las instrucciones que ha publicado la Consejería de Educación, pero si pensamos que hay una solución mejor, es el momento de plantearla con generosidad y trabajar por una solución conjunta".
Por todo ello, desde la Federación de AMPAS de las cooperativas regionales consideran que es necesario "analizar con calma la situación y actuar proponiendo mejoras, siendo esta la forma de contribuir a la mejora de nuestro sistema educativo".
Desde Fampace recuerdan también que esta situación ha causado en muchas familias "situaciones muy complicadas, dificultando aún más el escenario de la conciliación laboral y familiar", agravado por un inicio de curso que "seguramente va a requerir del uso de franjas horarias distintas y de la figura de los abuelos para que los padres y madres puedan acudir a sus puestos de trabajo", recuerda Rafael Martínez.