El consejero de Presidencia y Hacienda participa en la reunión de constitución de la Conferencia Sectorial de Reto Demográfico, una iniciativa nacional en la que se abordarán los retos en este ámbito
Durante el encuentro, el titular de Presidencia pidió a la ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico que incluya a las pedanías que pierden habitantes en su lucha contra la despoblación
El Gobierno regional trabaja ya en la Estrategia de lucha contra la Despoblación, un plan destinado a frenar este fenómeno y mejorar la calidad de vida en las zonas rurales y que se centrará en las zonas del Noroeste, Valle de Ricote y Río Mula. Así lo anunció hoy el consejero de Presidencia y Hacienda, Javier Celdrán, tras participar en la reunión de constitución de la Conferencia Sectorial de Reto Demográfico junto con el resto de comunidades autónomas y la ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera.
El titular de Hacienda recordó que aunque la población de la Región "es de las que más crecen de toda España, en los últimos 10 años estamos asistiendo a movimientos demográficos que están generando una importante pérdida de habitantes en zonas como el Valle de Ricote, el Noroeste, la comarca del Río Mula o algunas pedanías de Lorca".
En los últimos 5 años, en concreto, un total de 14 municipios de la Región han perdido población, como son Albudeite, Aledo, Ojós, Ricote, Ulea, Abanilla, Moratalla, Calasparra, Cehegín, Bullas, Campos del Río, Pliego, Caravaca de la Cruz y Lorca.
En este sentido, una de las peticiones que planteó el consejero de Presidencia a la ministra Ribera durante la Conferencia Sectorial de Reto Demográfico fue precisamente que se tenga en cuenta a aquellos municipios que, pese a que puedan mantener su población o incluso crecer, lo hacen a costa de sus propias pedanías.
"En la Región hay municipios de menos de 1.000 habitantes que padecen los efectos de la despoblación, pero este fenómeno se da también en algunas pedanías de Lorca o Caravaca, que se van vaciando de manera alarmante".
Celdrán recordó que los habitantes de estas zonas que son víctimas de la despoblación "tienen mayores dificultades a la hora de acceder a servicios básicos como la sanidad, la educación, el transporte, la banca o las redes de comunicación, lo que a su vez aumenta el riesgo de pobreza y exclusión".
"Esta desigualdad puede comprometer aún más la salida de estos territorios de la crisis social y económica generada por el coronavirus, por lo que estamos instando al Ministerio para el Reto Demográfico a que los incluya también en su agenda de lucha contra la despoblación", advirtió Celdrán.
Para impulsar esta reactivación, la Estrategia contra la Despoblación del Gobierno regional estará orientada a poner en marcha medidas en todos los ámbitos, desde el fiscal, educativo, sanitario o de acceso a la vivienda a los del estímulo del empleo y la formación o la mejora de las comunicaciones y la implantación del proceso de transformación digital en las zonas rurales.
"Además, la Estrategia reACTIVÄ2020 cuenta con medidas específicas de apoyo a los municipios y a las zonas rurales destinadas a que ningún habitante de la Región, viva donde viva, se quede atrás en este camino de recuperación que estamos iniciando".
En la actualidad se está trabajando en el diseño y definición de los ejes estratégicos de este plan, y está previsto que a principios del próximo otoño se pueda constituir la Mesa contra la Despoblación, un órgano que se encargará de hacer un seguimiento a este fenómeno demográfico en la Región y que estará constituida inicialmente por el Gobierno regional y los alcaldes de los municipios que se ven afectados por esta progresiva pérdida de población.