Esta familia profesional especializa en actividades como la soldadura o el diseño de tubería industrial
Los cursos de formación de fabricación mecánica son a día de hoy los más eficaces en la Región de Murcia de cara a una contratación posterior, según pone de manifiesto el último informe trimestral 'Inserta' elaborado por el Servicio Regional de Empleo y Formación (SEF). Así, el 68,8 por ciento de estos alumnos se incorporan a un puesto de trabajo durante el tramo de seis meses siguientes a la finalización de la acción formativa, un dato que está más de 24 puntos por encima del de inserción general en el total de sectores, que es del 44,3 por ciento.
La formación en fabricación mecánica ofrece cursos como los de soldadura con electrodo revestido, soldadura oxigas, diseño de tubería industrial, robótica, operaciones de metalgráfico, mecanizado por arranque de viruta, mecanizado por corte y conformado, o mecanizado de tuberías. Algunos de los perfiles demandados por el mercado laboral son los de supervisor de soldadura y supervisor de estructuras metálicas.
A continuación, son los cursos de energía y agua los que tienen una mayor relación con la contratación posterior (un 66,2 por ciento), seguidos de los cursos de transporte y mantenimiento de vehículos, con una tasa de inserción del 62,9 por ciento; los marítimo-pesqueros (61,8 por ciento) y los de actividades físicas y deportivas (60,7 por ciento).
La directora general del SEF, Marisa López Aragón, destacó sobre estos datos que "pueden ser orientativos acerca de las familias profesionales que demandan un mayor número de profesionales formados a través de nuestros cursos de formación. En cualquier caso, la pandemia puede influir en el futuro en estos parámetros, y por eso queremos proporcionar a los desempleados la formación que sea más requerida por las empresas en el nuevo escenario".
El estudio evalúa la inserción laboral de los 8.023 alumnos que completaron cursos para desempleados entre el cuarto trimestre de 2018 y el tercero de 2019, para lo que se tienen en cuenta los seis meses siguientes a la finalización de la acción formativa.
La tasa de inserción general del 44,3 por ciento se tradujo en que 3.558 participantes encontraron trabajo en ese periodo, y supone un incremento de 2,1 puntos con respecto al dato general del anterior estudio trimestral del SEF (42,2 por ciento).
Los datos del SEF también reflejan que los cursos son especialmente útiles entre los jóvenes. Así, el porcentaje de inserción de alumnos asciende al 49,8 por ciento para los menores de 30 años, mientras que para los alumnos de entre 30 y 44 años es del 46,4 por ciento, y del 34,6 por ciento para los de 45 años o más. Igualmente, las contrataciones benefician en mayor medida a los hombres (47,8 por ciento) que a las mujeres (41 por ciento).
El periodo de tiempo que permanecen en desempleo las personas que realizan uno de estos cursos es, asimismo, un factor que determina una inserción posterior. De esta manera, el 27,1 por ciento de los alumnos que acumulan más de dos años en paro logran un empleo tras participar en un curso, pero el porcentaje asciende al 36,6 por ciento si acumula entre uno y dos años en paro, y llega al 49,7 por ciento en el caso de que el participante lleve menos de un año desempleado.
La inserción crece en los cursos con certificado de profesionalidad
La probabilidad de encontrar empleo tras realizar un curso que conduce a la obtención de un certificado de profesionalidad es mayor que cuando la acción formativa no da acceso al mismo. Así, en estos cursos (que son la mayoría en el SEF) la cifra de inserción se eleva hasta el 49,3 por ciento, es decir, cinco puntos más que el dato general. Los certificados de profesionalidad son titulaciones con validez en todo el ámbito nacional y representan acreditación suficiente para el desempeño de una profesión.