En estos momentos, proteger la salud de las personas es la máxima e indiscutible prioridad de toda nuestra sociedad, pero es preciso también dar la respuesta adecuada a la profunda crisis social, económica y laboral que, simultáneamente, ha generado la pandemia del Covid-19.
UGT lamenta que la acción del Gobierno regional haya descuidado este frente, obviando su responsabilidad o limitándose a derivarla a otros ámbitos de la gestión pública. Las escasas medidas económicas adoptadas hasta el momento, básicamente relacionadas con ciertas exenciones y bonificaciones fiscales, moratorias en el pago de tributos o el apoyo "virtual" a empresas y autónomos -al margen del diálogo social y sin cobertura presupuestaria conocida- son, a juicio de UGT, absolutamente insuficientes para paliar mínimamente el grave deterioro que se está produciendo en nuestro tejido productivo.
Tal ausencia de interés por el diálogo social e inacción en el plano socioeconómico difiere mucho, además, de la actitud adoptada por los Ejecutivos de otras Comunidades Autónomas en las que Agentes Sociales y Gobiernos regionales se han puesto manos a la obra o, incluso, ya disponen de acuerdos en vigor para apoyar la reactivación económica y proteger a las personas afectadas.
El Sindicato entiende que resulta imprescindible, en nuestra Región, que se acometa igualmente, y con urgencia, un proceso de diálogo social que pueda culminar en un plan de medidas ambiciosas y valientes, con el respaldo presupuestario preciso, para dar una respuesta pronta y eficaz a las necesidades sociales actuales, pero también para planificar en el medio y largo plazo un modelo económico y productivo moderno, sostenible, fuerte y preparado para este tipo de vicisitudes.
UGT remarca que es momento de reorientar con urgencia las políticas activas de empleo; arbitrar medidas de protección adicional para las personas en situación de desempleo;incrementar sin titubeos la inversión en seguridad y salud laboral; prestar apoyos reales a empresas y autónomos para que mantengan el empleo, puedan asegurar el reinicio de la actividad en condiciones de seguridad y abordar la modernización y digitalización de su actividad; de incrementar las ayudas de emergencia socialy acelerar las medidas de lucha contra la pobreza, enfocándolas a los colectivos más vulnerables; y de apoyar la conciliación de la vida laboral y familiar (muy especialmente, mientras se mantengan cerrados los centros educativos y los centros de día). En el ámbito de los servicios públicos, se deben fortalecer con urgencia las plantillas y agilizar el acceso a ellos, especialmente a los que están siendo más demandados por la ciudadanía, como los sociosanitarios, los de ayuda a domicilio, o los de responsabilidad de la Consejería de Empleo, Investigación y Universidades, donde aún no se han resuelto la inmensa mayoría de los miles de ERTE´s presentados, cuatro semanas después de haberse aprobado la norma que los regula (RD-Ley 8/2020, de 17 de marzo).
UGT entiende, asimismo, quese tiene que aprovechar este proceso de reactivación económica para abordar, de forma integral y coordinada, las políticas públicas necesarias ante el incesable deterioro medioambiental del Mar Menor, que vienen siendo reclamadas por nuestro Sindicato desde hace ya más de tres años.
Los Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia tienen que dar cobertura al incremento del gasto social que precisan estas ineludibles medidas, y para llegar donde no lleguen las puestas en marcha por el Gobierno de España o para complementar aquéllas; pero, en todo caso, necesarias para asegurar la supervivencia y el futuro de empresas, autónomos y trabajadores y trabajadoras de nuestra Región.