En la Región de Murcia el paro baja en 918 personas en el mes de febrero contando con 101.485 personas frente a las 102.403 en enero de 2020 pero la temporalidad en la contratación el del 90%.

El paro ha bajado en todos los sectores, mientras ha subido en las personas que buscan un primer empleo.

Las mujeres mayores de 44 años sin empleo anterior siguen excluidas del mercado de trabajo y por tanto de una pensión digna en el futuro.

En la Región de Murcia contamos con 101.485 personas en paro, 918 menos que en el mes de enero y según el SEPE. La variación interanual nos dice que respecto a febrero de 2019, hay 5.454 personas menos en paro.

El porcentaje de mujeres en paro no varía y sigue siendo del 61%, es decir, se contabilizan 39.895 hombres y 61.590 mujeres. Las personas menores de 25 años suman el 10% en igual proporción respecto al sexo, esto tampoco ha cambiado.

Tampoco varían mucho los datos según el sector en el que se encuentran estas personas sin empleo manteniéndose el sector servicios con el 66% en primer lugar con 66.933 personas en paro, un sector claramente feminizado. En segundo lugar con el 11% se encuentra el sector industrial en el que hay 10.684 personas, en tercer lugar se encuentran las personas sin empleo anterior (9%) que suman 9.178 personas. Le sigue el sector de la construcción con el 11% y un total de 10.684 personas, para finalizar con el sector agrícola (7%) con 6.797 personas en paro.

Las personas mayores de 44 años sin empleo anterior suman el 35% de este colectivo y son las mujeres las que tienen más barreras de acceso al empleo sin que este dato se mueva. El 42% de las mujeres sin empleo anterior tiene más de 44 años y son mujeres que caminan directamente a la dependencia del sistema, o de otras personas y que a lo único que pueden acceder, es a una prestación de supervivencia.

Respecto a los contratos, en febrero se han realizado 77.733 contratos, 2.829 más que en enero de 2020, pero 1.256 menos que en febrero de 2019. Este descenso en la contratación significa que se han realizado 7.644 contratos indefinidos (963 más que en enero) y 70.089 contratos temporales (1.866 más que en enero de 2020).

La contratación temporal disminuye una décima y llega al 90% y la indefinida se incrementa en esa décima y supone el 10% del total de contratos realizados en febrero.

El mayor número de contratos se ha realizado en el sector agrícola (46%), el sector servicios (41%), Industria (8%) y la menor contratación se ha producido en construcción (4%).

Del total de personas en paro, en el mes de enero 62.069 han percibido alguna prestación por desempleo en la Región de Murcia, (61%) de las personas en paro; también significa que el 39% no ha percibido ninguna prestación.

De quienes si han cobrado prestación, 32.194 personas han percibido la prestación contributiva, 24.332 personas han cobrado subsidio unos 430 euros, 5.542 han recibido la renta mínima de inserción (misma cantidad), es decir, que 29.874 personas viven con 430´27€ mensuales y en muchas familias son el único sustento por lo que a vista de los datos la Región de Murcia está en situación de precariedad laboral a pesar de los datos positivos del mes de febrero respecto al paro y la contratación.

Por otro lado, la afiliación media mensual a la Seguridad Social en el mes febrero ha sido de 592.712 personas (338.362 hombres y 254.350 mujeres) respecto al mes de enero. Esto quiere decir, la afiliación media a la Seguridad Social ha subido en 7.260 personas, (4.343 hombres y 2.917 mujeres)

CCOO RM considera que la temporalidad, primera causa de la precariedad laboral junto a la parcialidad en los contratos y la falta de medios en la Inspección para combatir la economía sumergida, son constantes en el mercado de trabajo de la Región, causan empobrecimiento de la población y mantienen colectivos en exclusión social, donde las mujeres mayores están abocadas a no cobrar una pensión digna.

CCOO RM exige el desbloqueo de la negociación colectiva, la derogación de la reforma laboral, una apuesta por las políticas activas de empleo desde las instituciones, dotación de más recursos a la inspección de trabajo para que pueda luchar contra el fraude, un cambio del modelo productivo hacia un trabajo decente y la eliminación de la brecha salarial, que como vimos el pasado 20 de febrero se sitúa en un 24,82%, colocando a la Región como la tercera comunidad con la brecha más alta.