Los sacerdotes de la Diócesis de Cartagena han realizado esta mañana un retiro de Cuaresma junto a Mons. Lorca Planes en el Santuario de la Fuensanta. Tras el rezo de la Hora Intermedia, el Obispo de Cartagena ha querido ofrecer a los presbíteros algunas ideas para este día de reflexión en comunión instándoles a fijarse en Cristo y a ponerse en las manos de María, la Virgen de la Fuensanta, “que en este momento está en la Catedral escuchando las plegarias de todos los murcianos”.

“No tenemos otra gloria sino la de servir, con ilusión y con esperanza. Servir para nosotros es la mejor lección que hemos aprendido de Jesús”. Citando al Papa Francisco en su mensaje para esta Cuaresma, en el que invita a ser valientes y restaurar los corazones como cristianos, el Obispo ha querido destacar la importancia de renovar “el deseo de servir al pueblo de Dios”. Así mismo, ha animado a los sacerdotes a acercarse a los despreciados y débiles, a los enfermos, a los invisibles, “como buenos pastores cuyo fin no es otro que cuidar del rebaño que nos ha sido encomendado” siendo conscientes de la necesidad de “interesarnos por todos y vivir el compromiso real de una entrega de vida al servicio de los necesitados. Los sacerdotes no somos filántropos ni funcionarios, sino padres y hermanos”.

Mons. Lorca ha pedido a los presbíteros presentes en este retiro que sean transparentes ante Dios aceptando ser los últimos y recordándoles la importancia de agarrarse a la cruz mirando a Cristo para imitarle. Además, les ha invitado a renovar la alegría del encuentro con el Señor “para transformarla en fidelidad y fuerza”.

Para el Prelado este retiro de Cuaresma es una oportunidad “de acercamiento al Señor y para decirle aquí estamos para hacer tu voluntad, de rezar juntos y vivir la experiencia de un presbítero que está cerca de Dios”.