El informe ambiental favorable: un paso atrás en la lucha contra el "fracking"
La reciente publicación en el Boletín Oficial del Estado del informe ambiental favorable a las prospecciones sísmicas del Proyecto "Leo", uno de los cuatro que prevén la futura utilización de las técnicas de fracturación hidráulica o "fracking" en el noroeste de la Región de Murcia, ha vuelto a disparar todas las alarmas. Las declaraciones de muchos municipios y la aprobación de una ley autonómica que obstaculiza la tramitación de los permisos no han sido suficientes para disipar las sombras que el "fracking" extiende sobre la región de Murcia y sus comarcas norteñas. Esta noticia nos recuerda, con crudeza, que tres proyectos ya concedidos y un cuarto en tramitación continúan adelante, pese a la oposición clara y expresa de Ayuntamientos, asociaciones ecologistas, agricultores y partidos políticos en las zonas afectadas.
El Ministerio para la Transición Ecológica ha dejado vía libre a que las empresas titulares del Proyecto "Leo" puedan utilizar métodos sísmicos para detectar hidrocarburos, sin necesidad de declaración ambiental ordinaria. Es una decisión que lamentamos desde Podemos y que no ha tenido en cuenta un aspecto fundamental: que no tiene sentido evaluar aisladamente el impacto del método de prospección si este va orientado a una futura extracción mediante fractura hidráulica. Como ha señalado Ecologistas en Acción, una evaluación ambiental rigurosa tendría que haber considerado en su conjunto las distintas actividades previstas en el Proyecto "Leo", y no solo la prospección sísmica. Otros factores que agravan los riesgos ambientales son el posible efecto acumulativo de los otros proyectos concedidos o en tramitación, la proximidad de todos ellos a diferentes espacios protegidos y a la posible afectación de las aguas subterráneas y superficiales por los eventuales sondeos que se llevarían a cabo en caso de que la prospección sísmica arrojase un resultado positivo.
Riesgo de contaminación de las aguas del Sinclinal y del Río Segura
En este sentido, hay que recordar que la zona delimitada en el Proyecto "Leo" se extiende en gran parte sobre el acuífero del Sinclinal de Calasparra, que está conectado con el Río Segura, por lo que un posible episodio de contaminación afectaría a este curso fluvial y a los caudales del Tajo-Segura que por él circulan. Sin contar con que las aguas del sinclinal se usan, asimismo, como aguas de riego. La amenaza no tiene una dimensión solo ambiental, por tanto, sino también económica y de salud pública.
Es la hora de alzar la voz y renovar la lucha
No basta con declarar Cieza territorio libre de "fracking". Hay que conseguir que realmente lo sea. Y la situación no pinta bien, pues las empresas concesionarias siguen adelante con sus planes y la Administración del Estado no muestra una voluntad clara de oposición; por el contrario, se muestra colaborativa. Y no podemos olvidar que proyectos como "Leo", con actuaciones previstas en distintas comunidades, son competencia del Estado y no de las comunidades autónomas. No debería importar el color político de las administraciones cuando se trata de reivindicar el futuro de nuestro territorio y de sus habitantes. Es preciso oponerse con todas las fuerzas a la amenaza, ahora renovada, del "fracking" en el noroeste de la región. La sociedad ciezana, con su Ayuntamiento a la cabeza, y todas las fuerzas políticas municipales tienen que alzar su voz y gritar ¡NO!, y hacerlo cuanto antes y con la máxima publicidad. En Podemos-Cieza lo tenemos claro.